Serbios y croatas tratan de ganar influencia ante la futura configuración de Yugoslavia
MIRJANA TOMIC, El significado de las primeras elecciones libres, celebradas ayer en la República yugoslava de Bosnia y Herzegovina, trasciende los confines de su territorio. Tanto los serbios como los croatas luchan por su influencia en Bosnia para ganar terreno político ante el comienzo de las negociaciones acerca de la futura fisonomía de Yugoslavia.
Los serbios y los croatas esperan conocer la actitud de los partidos ganadores ante el dilema confederación o federación, ya que sólo los partidos tutelados por Zagreb y Belgrado -la Comunidad Democrática Croata en caso del primero y el Partido Democrático Serbio en el segundo- tienen definida su postura: confederación versus federación. La gran incógnita será la postura de los musulmanes, cuyo Partido de Acción Democrática eludió definir sus posturas acerca del tema. Los serbios temen una coalición poselectoral croato-musulmana y prepararon de antemano el Comité Nacional Serbio como "garante de la seguridad del pueblo serbio".Sin embargo, los tres partidos nacionalistas -el serbio, el musulmán y el croata- formaron una coalición informal en contra de los comunistas y la Alianza de Fuerzas Reformistas, auspiciada por el primer ministro yugoslavo, Ante Markovic.Tres millones de electores, de los que medio millón son analfabetos, acudieron ayer a las urnas para elegir a siete miembros de la presidencia, 240 diputados para las dos Cámaras del Parlamento (la Cámara de los Ciudadanos y la de los Municipios) y a los representantes en los consejos municipales. La paridad étnica está garantizada, según los datos del último censo efectuado en 1981, cuando el 39% de la población se declaró musulmana (eslavos conversos), el 32% serbia, el 18,2% croata y el 8% yugoslava (la cifra más alta en el país balcánico).Si la combinación del sistema proporcional y mayoritario no logra la paridad étnica, las elecciones podrían repetirse. De los 28 candidatos que compiten para los siete puestos en la presidencia, dos tienen que ser croatas, dos serbios, dos musulmanes y el séptimo está bajo la categoría "otro".
Los partidos nacionalistas ofrecen renacimiento de sus propias etnias. El líder musulmán Alija Izetbegovic promete que los niños musulmanes aprenderán su propia historia y critica a Ante Markovic porque ningún miembro de su Gabinete es musulmán.
Dirigente nacionalista
El dirigente nacionalista serbio, el psiquiatra Radovan Karadzic, "experto en la terapia de grupo", apareció en la campaña electoral tocando el gusle, un antiguo instrumento serbio, monocorde y monótono, que acompaña el canto de los poetas épicos. Karadzic dijo que podría tocarlo todo el día: es su hobby.
El líder comunista Nijaz Durakovic declaró: "Hasta la gente normal puede ser comunista", y se proyecta como una opción pacificadora de las facciones étnicas. Por su parte, el rector de la Universidad de Zarajevo y dirigente reformista, Nenad Kecmanovic, predijo: "En las elecciones de Bosnia ganarán los comunistas -los actuales o los antiguos-", ya que el pasado político común une a todos los enemigos políticos actuales.
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