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Las andanzas del díscolo Penev

El Valencia abre expediente al delantero búlgaro, que ha viajado sin permiso a su país

La fuga de Luboslav Penev a Bulgaria, el pasado lunes, ha sido la gota que ha colmado el vaso de la paciencia del Valencia CF y la confirmación de que el delantero búlgaro es un jugador díscolo e indisciplinado al que el club de Mestalla no ha podido sujetar hasta ahora. El Valencia ha abierto expediente a Penev, que lesionado y todo viajó a Bulgaria, sin el permiso del club, para integrarse en la selección de su país. El jugador, lejos de cortarse ante el escándalo producido por sus escapadas nocturnas en Valencia, que han causado estupor en la directiva y la afición, dio una nueva vuelta de rosca y optó por hacer mutis por el foro.El contraste entre la Bulgaría que dejó hace ahora un año para fichar por el club de Mestalla y Valencia parece haber sido demasiado para el joven Luboslav Penev, de 24 años, que ha quedado atrapado en una especie de irrefrenable deseo de recuperar el tiempo perdido, ahora que tiene dinero para hacerlo. Nada más llegar, a Valencia el búlgaro dio muestras de ello. Le faltó tiempo para comprarse lujosos coches y para dejarse ver por las noches en restaurantes y discotecas. La famosa noche valenciana había impresionado a Lubo Penev. Pero estaba recién llegado y, además, ofrecía un magnífico rendimiento en el terreno de juego. Y contaba con la seguridad de que mientras funcionara en el campo nadie osaría echarle en cara su comportamiento privado.

La buena racha del búlgaro en este sentido quedó truncada al final de la pasada temporada, cuando se le diagnosticó una hepatitis. Una enfermedad que bien podía estar relacionada con su vida irregular, aunque por entonces tampoco se dijo nada al respecto, pese a todas las sospechas.

Penev pasó todo el verano inactivo y aunque en un principio se pensó que hasta bien entrada la temporada no podría estar listo para jugar, su recuperación se aceleró y, aún con exceso de peso y en evidente baja forma física, Espárrago le hizo debutar en el partido de vuelta de la primera eliminatoria de la Copa de la UEFA jugado el 3 de octubre ante el Heraklis en Mestalla.

Penev parecía nuevamente encarrilado para el equipo y empezó a rendir mejor. Pero quién sabe si por sus nocturnas aficiones o por la mala marcha general del Valencia, o por ambas razones, lo cierto es que el búlgaro no terminaba de recuperar la forma y el juego que en la pasada temporada levantaba de los asientos a los aficionados valencianistas. Paralelamente, empezaban a ser un clamor en la ciudad las andanzas nocturnas del jugador, que se dejaba ver hasta altas horas de la madrugada en conocidos locales.

Tema de conversación

Las escapadas nocturnas del búlgaro fueron uno de los temas de conversación preferidos entre los directivos valencianistas durante el viaje de la pasada semana a Roma, donde el Valencia fue eliminado de la Copa de la UEFA. La mayoría de los directivos coincidía en señalar que era un escándalo y que había que "hacer algo" para meter en cintura al jugador. "No ha digerido esta situación", comentó ayer un directivo para explicar que el contraste entre Bulgaria y Valencia ha sido excesivo para Penev.Espárrago se había llevado a Roma a Penev, a pesar de su tendinitis en la rodilla. El búlgaro jugó y se resintió. El pasado sábado acudía a Madrid, donde le fue confirmado el diagnóstico. El médico del Valencia le recomendó 48 horas de reposo y que no jugara partidos en una semana, por lo menos, para ver si se recuperaba para el encuentro de este sábado ante el Real Madrid. El pasado lunes Penev era esperado en la ciudad deportiva de Paterna, aunque no debía entrenar. El búlgaro no apareció. Estaba de camino hacia Bulgaria, desoyendo así los consejos del presidente del Valencia, Arturo Tuzón, que en la tarde del domingo le pidió que no viajara.

La directiva del Valencia se reunió el lunes por la tarde y decidió abrir expediente al jugador, que probablemente será multado. Según Alberto de Miguel, secretario de la junta valencianista, eso todavía no se ha hecho porque aún no se ha podido hablar con Penev. El Valencia ha comunicado a la federación búlgara y a la UEFA la situación del jugador y ahora está a la espera. En todo caso, según de Miguel, la multa será elevada y aunque el Valencia no ha dado cifras, se habla de un millón de pesetas.

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