El concejal de Arganzuela prohíbe que en su distrito se hable sobre Azaña

El concejal presidente de Arganzuela, Clemente Torres, del Partido Popular, ha suspendido dos conferencias sobre la figura de Manuel Azaña, presidente de la II República Española, previstas para la próxima semana en la Casa del Reloj, según confirmó la directora del centro cultural, Suni García de Biedína, que las había programado.

Según personas conocedoras de la orden de Clemente Torres, el concejal ha prohibido las conferencias porque no estaba de acuerdo con el papel que jugó el político republicano liberal, que fue presidente de la República Española hace casi 60 años, y ha señalado que asumirá el coste político que se desprenda de esta decisión.Las mismas personas consultadas añadieron que se trató de convencer al concejal conservador con argumentos como que el propio presidente de su partido, José María Aznar, había elogiado ciertos aspectos de la vida política de Manuel Azaña; que el Ayuntamiento de Madrid, gobernado por una coalición de centro-derecha, había participado en diversos actos de homenaje con motivo del 50 aniversario de su muerte, y que él "no podía ser más papista que el papa". No obstante y pese a estas consideraciones, el concejal no ha rectificado su decisión.

Clemente Torres llegó a sugerir que por qué no se hablaba del ideólogo de Falange Española José Antonio Primo de Rivera. Ésta es la primera ocasión en la que el concejal interviene en la programación cultural de su distrito. El concejal no pudo ser localizado ayer en su domicilio.

La incredulidad de un experto

Feliciano Páez, doctor en Historia Contemporánea, que el próximo lunes debía pronunciar una conferencia sobre la vertiente política e histórica de Manuel Azaña, se mostró incrédulo hacia la posición de intolerancia del concejal, y recordó las palabras que el presidente de la República pronunció en su día: "Buscar en el pasado razones de enemistad e interpretar la historia para hacerla servir de elemento al odio es una aberración".Páez, que realizó su tesis doctoral sobre la figura del presidente de la II República, añadió que el pensamiento y la palabra de Azaña son más pertinaces que el odio y el silencio, y recordó que fue Azaña quien dijo que el pueblo español tenía derecho a volver la vista atrás para algo que no fuera empapar su corazón en hiel. La segunda conferencia que se iba a pronunciar se limitaba a analizar los aspectos literarios del político, nacido en Alcalá de Henares.