UGT y CC OO tratarán los temas pendientes sin considerarlos concertación

Los secretarios de acción sindical de UGT, Apolinar Rodríguez, y de CC OO, Agustín Moreno, se reunieron ayer para analizar el resultado de los recientes encuentros mantenidos por separado con el ministro de Economía, Carlos Solchaga. La resolución de los dos sindicatos es acudir a las cuatro mesas interrumpidas en julio, pero no las consideran auténtica concertación. Asimismo han decidido que no van a aceptar un pacto de competitividad limitado a imponer un ajuste salarial con "algún adorno", consistente en "una recomendación moral a los empresarios" para que autocontrolen sus beneficios.La negativa del Gobierno a abrir otras mesas propuestas por las centrales, como los fondos de inversión, el fomento del empleo, la revisión de las modalidades de contratación y la reforma fiscal, constituyen a juicio de los sindicatos un grave incumplimiento de los compromisos adquiridos el 4 de junio.

La previsión de UGT y CC OO es que se van a producir conflictos sociales de gran enver gadura si el Ejecutivo congela las mejoras prometidas y la primera acción de protesta la van a protagonizar los funcionarios, dado que no ha existido una auténtica negociación colectiva, reconocida en los pactos suscritos en enero. También reclaman la imediata puesta en marcha de la ley de pensiones no contributivas y la participación sindical en la elaboración del decreto de revalori zación de las pensiones de la Seguridad Social, en el que piden se incluya un aumento superior a la inflación pasada para las prestaciones más bajas, como las de viudedad.

Además de esos objetivos, la principal tarea que se proponen UGT y CC OO en los próximos meses es "erradicar la eventualidad en el mercado laboral". Asimismo han acordado en la reunión de ayer, que forma parte de la comunicación continua que piensan mantener, el exigir al Gobierno que abra una negociación inmediata sobre sanidad pública y vivienda social, que Carlos Solchaga parece haber aceptado pero sin concretar nada. Para las dos centrales son cuestiones importantes y Apolinar Rodríguez afirma que no pueden ser "mesas de arte y ensayo", sino que requieren una importante dotación presupuestaria no recogida en la ley de presupuestos de 1991.

También van a reclamar que se cumplan los compromisos de junio consistentes en negociar el incremento de la cobertura del desempleo, con el cumplimiento de la sentencia que reconoce pagas extras a los parados; la revisión de las modalidades de contratación para estabilizar el mercado de trabajo; y los grupos de trabajo destinados a debatir los fondos de inversión y el medio ambiente.

Agustín Moreno asegura que los sindicatos no van a renunciar a negociar ese temario ni a un nuevo debate sobre la reforma fiscal. En su opinión el fraude del IVA descubierto estos días es sólo la punta del iceberg ya que el dinero negro puede suponer cua tro billones de pesetas. Mientras el Gobierno accede a esas de mandas, se sentarán a culminar la elaboración de la ley de salud laboral; la formación profesional; la constitución del Consejo Eco nómico y Social; y el reparto del trabajo a través del control de las horas extraordinarias y el adelanto de la edad de jubilación, en el que van a seguir insistiendo, pese a la negativa expresada ya por los responsables del Ministerio de Trabajo en los encuentros mantenido antes del verano.