La continuación del paro obliga a muchas empresas a sumarse al cierre
EL PAÍS La asamblea de transportistas decidirá hoy sobre la continuidad de la huelga que ha provocado el cierre de numerosas fábricas e importantes pérdidas en la agricultura y la ganadería. La Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE) evaluaba ayer en 50.000 millones de pesetas las pérdidas totales ocasionadas por el conflicto que, asegura, producirán un impacto directo sobre el empleo y la inflación de este mes.
El País Vasco ha sido la comunidad donde más ha repercutido la huelga. Ayer mismo, los empresarios y la Cámara de Comercio de Vitoria habían creado un comité de crisis para buscar soluciones. La situación por la que atravesaban las empresas vascas fue calificada de "máxima gravedad", según representantes de los empresarios. Sólo en Álava las pérdidas ascienden a 1.400 millones de pesetas, a razón de unos 400 millones diarios. Las fábricas más afectadas por la huelga son Michelin, Arregui, Fundix, Mercedes Benz, Miguel Carrera, Acenor, Tubacex, Villosa de Llodio y Tubos Reunidos en Amurrio. El cierre afectó en la provincia de Guipúzcoa a empresas del metal, textil, papeleras y electrodomésticos. En Vizcaya se enfrentaron a serios problemas de abastecimiento Altos Hornos, Babcock Wilcox, Naval de Sestao y Metalquímica.
Durante la última semana, casi el 50% de las empresas aragonesas han dejado de facturar. Balay, que cerró el pasado miércoles sus dos fábricas de Zaragoza, había solicitado ayer la regulación de empleo durante 10 días para sus 1.000 trabajadores, y la factoría de General Motors, que cuenta con 9.500 empleados, había paralizado su producción.
Sin piezas
En Ávila, a las nueve de la mañana de ayer paraba su actividad la principal factoría de la provincia, Nissan Motor Ibérica, por falta de piezas. FASA-Renault de Valladolid y Palencia ampliaba en dos días- el expediente de regulación de la producción. Michelin, con fábricas en Aranda de Duero (Burgos) y Valladolid, con cerca de 5.000 trabajadores, sufrió también problemas de desabastecimiento. Ayer continuaron cerradas además las factorías de Ford de Almussafes, de Seat en Pamplona y Barcelona, la de Citroén en Vigo y la de Firestone en Torrelavega.
En el sector lácteo, algunos ganaderos de León y Zamora se vieron obligados a tirar por los desagües o regalar miles de litros de leche. La fábrica Nestlé de Cantabria recibió 100.000 ayer litros de leche, la mitad de lo normal. En el sector agroalimentario, las azucareras estuvieron recibiendo remolacha en cantidades mínimas, lo que les acarreó pérdidas cuantiosas.
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