Hacienda investiga el origen de fondos del "caso Sampere"

Hacienda ha solicitado a los afectados en el caso Sampere que justifiquen el origen de sus aportaciones a las comunidades de bienes y sociedades que invirtieron 2.200 millones de pesetas en Bolsa. El fisco pretende comprobar si se utilizó dinero negro, pero está encontrando más dificultades de las esperadas para destapar a los verdaderos inversores.Estas dificultades se derivan de la profusa utilización de intermediarios y hombres de paja que están sacando a la luz las investigaciones. Hasta la fecha, el fisco ha utilizado la relación de personas físicas y jurídicas que figuraban como miembros de las comunidades de bienes y sociedades, que cursaron sus órdenes de compra y venta a las sociedades y agencias de valores que intervinieron en las operaciones.

Las operaciones que ahora investiga Hacienda consistieron en la captación de fondos por algunas comunidades de bienes para invertirlos en Bolsa y sobre los que se prometían rentabilidades anuales entre el 25% y 45%, con pago adelantado de parte de los rendimientos pactados. Fuentes jurídicas señalan que las comunidades de bienes encarnan una figura poco común, ya que al ser entidades de derecho civil y no mercantil pueden carecer de personaldiad jurídica propia y de responsabilidades directas si los pactos entre sus socios llegan a ser secretos.

Numerosas fuentes consultadas coinciden en que tras estas sociedades se encuentra Juan Sampere de Luna, ex apoderado del despacho del antiguo agente de cambio y Bolsa Alejo Buxeres, que en 1985 protagonizó en Barcelona un descubierto de 1.500 millones de pesetas que hubo de hacer frente el entonces colegio de agentes.

Según medios próximos a la investigación, contra lo que se estimaba cuando estalló el caso Sampere, sólo parece existir un reducido grupo de damnificados que no sobrepasaría la treintena. Sólo tres de ellos han presentado denuncias, lo que abona la tesis de que existe dinero negro.

Hacienda ha requerido también la colaboración de los abogados de las partes presuntamente implicadas. En los últimos cuatro meses se han sucedido sin éxito las negociaciones entre Francisco Segura de Luna, abogado de Juan Sampere de Luna, y el defensor de los inversores, Tomás Buxeda, que ahora ha sido relevado por el abogado Carlos Rey.