Bajo sospecha
La llegada de unas elecciones agudiza la sensibilidad de los partidos y los sindicatos respecto. a los medios de comunicación. Pese a que todavía no se ha establecido de una forma clara si existe una relación directa entre la opinión pública expresada en las urnas y las informaciones y opiniones que recogen los medios de comunicación, la desconfianza de los políticos respecto a los medios aumenta. Buena prueba de ello es la carta remitida por Francisco Naranjo, secretario de prensa y publicaciones de Comisiones Obreras de Madrid, en relación con varias noticias publicadas por este diario en las últimas semanas."No quisiéramos ser mal pensados", afirma, "pero a nuestro entender, el tratamiento de las informaciones que le he comentado da que pensar; por ello le rogaría, además de contrastar la información que le comento, que a ser posible, cara al futuro, esos grandes profesionales de la sección Madrid de su independiente y digno periódico fueran más imparciales a la hora de publicar una información. Le recuerdo que CC OO es la primera fuerza sindical de Madrid, y estamos en plena campaña electoral sobre elecciones sindicales, y cualquier noticia sociolaboral que se da en estas fechas se mira con lupa".
Las quejas del secretario de prensa de CCOO hacen referencia a tres noticias en las que no se mencionaba a su sindicato, pese a haber tenido una presencia similar a la de su rival electoral, UGT, cuyas opiniones, sin embargo, sí se recogían en las informaciones. En un caso, esa laguna informativa fue corregida al día siguiente. En los otros dos casos, la información publicada era de una agencia de noticias, lo que no exculpa al periódico.
La responsable de la sección de Madrid, Sol Fuertes, señaló al Ombudsman que en ningún caso ha existido voluntad de marginar informativamente a CC OO, y que cuando se ha advertido un error se ha procurado corregirlo.
El Defensor de los Lectores no sabe si la lupa, a la que hace referencia el secretario de prensa de CC OO, es un buen instrumento para descubrir la imparcialidad de las informaciones dado el grueso calibre con que se dispara en la prensa madrileña.
Guerra y paz
Rafael Bardají, director del Grupo de Estudios Estratégicos (GEES), ha escrito al Ombudsman para quejarse de la forma en que se hace referencia a su empresa en el artículo 2001, el final de la odisea, de Javier Ayuso, publicado el pasado domingo.
El artículo, tras una introducción de periodismo-ficción, explicaba las diferentes opciones que se barajan en el debate sobre el futuro de los ejércitos en España. El autor mencionaba, entre otras, la ponencia que Ignacio Coisidó, analista del GEES, presentó ante la Comisión de Defensa del Congreso, que estudia un nuevo proyecto de ley sobre el servicio militar.
Bardají considera que esa ponencia fue presentada por su autor a título personal, y que Ayuso la atribuye erróneamente a su organización. Además, considera que el periodista trata a su organización de manera "discriminatoria, negativa y sesgada" al asegurar que mantiene una "ideología contraria" a la organización pacifista Centro de Investigación para la Paz (CIP), que también presentó una ponencia ante la Comisión de Defensa del Congreso. Otro ejemplo de esa parcialidad sería la calificación de modelo Rambo, imagen que, en opinión de Bardají, "de todos es bien conocida, reída y despreciada", y que el periodista atribuye en su artículo al proyecto del analista del GEES. Finalmente, Bardají critica la afirmación de Ayuso de que su organización no cuantifica los costes de un ejército profesional.
Javier Ayuso considera que "la presencia de Ignacio Coisidó en el Congreso de los Diputados como analista del GEES, sus opiniones y su propia ponencia representan a la institución. Otra cosa es que se podía haber hablado también con el director, señor Bardají u otro representante del GEES".
El periodista señaló que calificar las opiniones del GEES como "de ideología contraria" al Centro de Investigación para la Paz no supone una toma de posición a favor de una u otra tendencia. "Cuando un periodista escribe un reportaje tiene que interpretar (o por lo menos puede hacerlo) las posiciones de los protagonistas, y así lo hice. Sigo pensando que la ideología del GEES y la del CIP son contrarias, con la única coincidencia de ahogar por un ejército profesional. Los modelos de uno y otro son completamente distintos, así como sus ideas de fondo o los apoyos que reciben uno y otro".
Finalmente señaló que la referencia al modelo Rambo no implica ánimo despectivo ni menosprecio del modelo. "Simplemente se trata de definirlo de una forma gráfica".
Reconoce, sin embargo, la queja de Bardají en relación a que el GEES sí cuantifica los costes de su propuesta. "Creo que tiene razón en que mi expresión no es del todo correcta. Quizá debía haber escrito no profundiza, o no detalla, en lugar de no cuantifica".
El teléfono directo del Ombudsman es el 754 45 53 de Madrid.
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