Telefónica registra una caída de demanda del 6% tras cinco años de crecimiento ininterrumpido
Por primera vez desde 1985, Telefónica registra este año una caída en la demanda de líneas telefónicas, que se conjuga con una desaceleración del consumo telefónico. Según los datos contabilizados a finales de agosto, la tasa interanual muestra una caída del 6%, mientras que el consumo experimenta un incremento cercano al 3%, cuando las previsiones de la compañía apuntaban una tasa de crecimiento de casi un 5%. Esta evolución desembocará en un ajuste de las inversiones presupuestadas por Telefónica, que para el año que viene podrían reducirse un 30% sobre los 600.000 millones previstos.
El plan de inversiones de Telefónica, cuantificado en 3,6 billones de pesetas para el período comprendido entre 1990 y 1994, ha quedado en tela de juicio después de comprobada la evolución de las grandes variables de demanda que registra la compañía.Los últimos datos correspondientes al mes de agosto, señalan que la demanda neta (peticiones registradas menos peticiones canceladas) ha bajado un 6% sobre agosto del año anterior. Este dato supone la quiebra de cualquiera de las previsiones efectuadas por Telefónica desde que en 1985 la compañía empezó a contabilizar un crecimiento de demanda que puso al descubierto las deficiencias del servicio público, hasta el punto de que el Gobierno tuvo que asumir un plan especial de actuación destinado a aligerar el consiguiente crecimiento de la lista de espera telefónica. En 1988, cuando se presentó el citado programa de emergencia, la previsión de Telefónica apuntaba un crecimiento sostenido de la demanda hasta finales de 1992. Para 1990 se preveía una demanda neta de 910.000 líneas -en agosto del 90 sobre agosto del 89 supera ligeramente las 600.000- y para 1991 y 1992 se estimaban 950.000 cada año. El cambio de tendencia se ha producido con un año y medio de antelación, lo que, por otra parte, permitirá que la compañía reduzca sensiblemente su lista de espera, que, a finales del pasado año, superaba las 500.000 líneas.
Sin embargo, la caída puede, deparar consecuencias bastante más negativas si se tiene en cuenta el segundo parámetro de demanda, como es el tráfico telefónico que sirve para medir la utilización del servicio público y que, en suma, es el que incide más directamente en los ingresos de la compañía. El tráfico telefónico sigue aumentando, pero menos de lo previsto Telefónica esperaba un crecimiento de entre el 4% y el 5% que, en realidad, sólo ha sido de entre un 2% y un 3%, según datos recabados en la compañía.
El consejo de administración de Telefónica, presidido por Cándido Velázquez, celebró el miércoles su reunión mensual, en la que se abordó la nueva situación del mercado, que puede incidir en la política de inversiones de la compañía para el año próximo.
Si esta evolución prosigue en los próximos meses, fuentes de la compañía no descartan la posibilidad de que el plan de inversiones presupuestado para los próximos años deba ser ajustado, lo que, por otra parte, concuerda con los mensajes que la compañía está recibiendo de medios oficiales.
El recorte de las inversiones no se hará efectivo en 1990, pero todo hace pensar que empiece el próximo año, con una reducción que podría alcanzar el 30% de los 600.000 millones de pesetas presupuestados para 1991.
Telefónica Internacional
El consejo acordó también el nombramiento de Ignacio Santillana como consejero delegado de Telefónica Internacional, filial encargada de gestionar la proyección industrial que la compañía está llevando a cabo en los mercados exteriores. Santillana ocupaba la Subdirección General Financiera de Telefónica, donde será sustituido por Francisco Mochón.
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