Los últimos de Radio 3

Radio 3, de Radio Nacional de España (RNE), será reconvertida a partir del mes de octubre en una emisora eminentemente musical. El consejo de administración del Ente Público aprobó el pasado miércoles la nueva programación de RNE, en la que se incluye la total transformación de Radio 3, que ya no contará con programas de guión y de contenido cultural. De nada han servido las protestas de los trabajadores y de los oyentes de esta emisora, que ha marcado toda una época en la radio española y en la que se fraguó un nuevo estilo radiofónico.

Las puertas de acceso a la redacción de Radio 3 han sido empapeladas con noticias publicadas en diferentes medios sobre la reconversión de la emisora; un periódico recuerda una frase de Eduardo Sotillos, en Málaga, hace unos años: "Radio 3 sólo la escuchan putas y maricones", y otro apunta que fue Fernando Poblet el que dijo: "No puedes enseñar a leer a un comisario político".Unos días antes, los trabajadores de Radio 3, la radio joven de Radio Nacional, se enteraban por los pasillos de su reconversión. A partir de octubre se transformará en una emisora básicamente musical, al estilo, según los responsables de los programas actuales, de las normas al uso de las radios de frecuencia modulada (FM) privadas, donde lo importante no es que la música se escuche, sino que acompañe.

El miércoles, el Consejo de Administración de RTVE daba el visto bueno a los cambios previstos por la dirección.

Las peticiones de los trabajadores para que se mantuviera la línea crítica y de participación con la audiencia que hasta ahora ha caracterizado a la emisora no tuvieron eco en el Consejo.

Unos años antes, cuando se liquidaron los informativos de la emisora, tampoco se escuchó la reivindicación de los trabajadores ni de los oyentes habituales.

Música

Los musiqueros se quedan, pero desaparecen los programas de guión y de contenido cultural.Algunos, como El gallo que no cesa, Relatos a media tarde o Pensamiento 3, programa en el que colaboraba el filósofo Agustín García Calvo, ya no existen. Otros, como El ciempiés, Paseando sobre la Luna, 55 días en pokín, o Arroz tres delicias tienen una ubicación complicada en medios privados, dado su carácter abierto y de participación del oyente.

El ambiente en la emisora ante la casi inmediata reconversión es de desinformación total ante los cambios y cierto miedo.

Ninguno de los profesionales consultados quiso que apareciera su nombre. Todos temen que de un momento a otro se desencadene la caza de brujas.

El comité de los trabajadores se manifiesta a favor de que se mantenga la estructura actual aunque se planteen nuevas fórmulas. La música, consideran, se encuentra perfectamente representada.

José Luis Ramos, jefe de programas de Radio 3, trabaja durante estos días en la elaboración de una "nueva progamación musical con contenidos de interés juvenil, dirigida por presentadores con personalidad e independencia".

Según esta línea, basada en el modelo de la BBC-1, habrá franjas horarias, que aún no están determinadas, en las que sonará música programada por la propia emisora. Esta programación será diseñada por editores musicales.

Programas como Rosa de sanatorio o Escápate, mi amor, es pacios de variedades donde predomina la música, probablemente continuarán, y se respetará la especialización musical actual.

Ramón Trecet, uno de los más veteranos trabajadores de la emisora y conductor de Diálogos 3, dedica su programa a las nuevas tendencias; Jesús Ordovás, José María Rey y Tomás Fernando Flores, desde el Diario pop, impulsan géneros más comerciales como el rap, lo último en españoles y novedades extranjeras; Juan de Pablos programa nostalgia; Rafael Abitbol, una revista musical donde cabe desde la música de baile hasta la última tendencia; Carlos Galilea, con Cuando los elefantes sueñan con la música, emite brasileño y salsa y Jorge Muñoz, con Tren 3, uno de los poquísimos programas especializados en blues.

Carlos Tena, al que un miembro de la directiva de la emisora le ofreció incorporarse a la nueva programación, se negó en rotundo a participar en el cambio.

Futuro incierto

"Les auguro un futuro muy oscuro", asegura Tena. "Van a perder su actual audiencia para ofrecer lo mismo que ofrecen otras cadenas de frecuencia modulada. Es muy triste que desaparezcan ciertos programas de una radio pública", dice Tena, que trabajó en la emisora hace años, y que tiene serias dudas sobre el éxito de la reconversión: "Desaparecerá el estilo, el color y el aroma. Algunos musiqueros cambiarán hasta de manera de hablar cuando empiecen a entrar los mensajes publicitarios y tengan que interrumpir el programa".