_
_
_
_

El secretario, sin merienda

Anabel Díez

La reunión que ayer convocó la dirección del PSOE hubiera tenido un final feliz si al secretario general de la FSM, Joaquín Leguina, no se le hubieran encendido las luces de alerta. El interés de la comisión ejecutiva de hablar "de la parte y no del todo" del problema hizo que Leguina se embargara de múltiples sospechas. Los intervinientes se despidieron llenos de buenos deseos y se emplazaron a nuevas reuniones pero salieron de la sede federal del PSOE sin soluciones concretas.Leguina utilizó para explicar su situación la de un salchichón del cual se pretende cortar rodaja a rodaja con el previsible resultado de que este secretario general se quedara sin merienda. Esto es sin encabezar la lista de delegados para el 32º Congreso y sin la Secretaría General en su congreso regional por no añadir su obligada ausencia en la candidatura para la Comunidad de Madrid.

Más información
La ejecutiva del PSOE fracasa en su mediación ante Leguina al no garantizarle la secretaría general
González conocía por anticipado la decisión de sus ministros

Estos males son los que vislumbra Leguina si no adopta ahora una actitud de fuerza sino que, por el contrario, cede al primer requerimiento como es el de que no abandere la lista,de delegados para el 322 Congreso en aras de una candidatura de integración.

En un principio, tanto Leguina como Acosta, dijeron que sí a la petición de los ejecutivos a que se esforzaran por reunir al socialismo madrileño en una lista, pero las dificultades vinieron cuando Leguina no consiguió que se hablara de lo suyo, esto es, del conflicto global que vive con José Acosta. Leguina no obtuvo ninguna garantía sobre un cambio de actitud de Acosta en el sentido de que renunciara a disputarle la Secretaría General.

Victoria o derrota

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Así las cosas no parece factible que haya una sóla lista por lo que cada cual continuará su camino hasta la victoria o la derrota final, lo que queda en manos de los votos en las agrupaciones. Esta impresión podía desprenderse sin dificultad de las propias palabras de los intervinientes que después de hablar de la posIbilidad de una lista única se referían invariablemente al proceso de las agrupaciones y al sentimiento de victoria que cada cual alberga. José Acosta fue quizá el más prudente al rehusar "cuantificar" los apoyos con los que cree que cuenta y sólo mencionó que eran muy numerosos.

Más explícito fue Teófilo Serrano, miembro de la ejecutiva madrileña y encuadrado en el llamado sector guerrista para quien "Leguina no tiene los apoyos suficientes para encabezar una candidatura de gran mayoría" *

"Creo que tengo la mayoría suficiente para encabezar esta delegación y nuestra Posición es abierta. Quienes se han apartado pueden volver", dijo Leguina después de haber utilizado varias veces a Felipe González como cita de autoridad. Lo mismo hizo Acosta en sus explicaciones.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Sobre la firma

Anabel Díez
Es informadora política y parlamentaria en EL PAÍS desde hace tres décadas, con un paso previo en Radio El País. Es premio Carandell y Josefina Carabias a la cronista parlamentaria que otorgan el Senado y el Congreso, respectivamente. Es presidenta de Asociación de Periodistas Parlamentarios (APP).

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_