Milla: "Alguien del Barça me ha echado mal de ojo"
Luis Milla, ex jugador del Barcelona recientemente incorporado a la plantilla del Real Madrid, no podrá volver a jugar hasta dentro de seis meses como mínimo. Milla, que sufrió una rotura del ligamento cruzado anterior y del menisco interno de la rodilla izquierda en la final del trofeo de La Línea, fue intervenido ayer quirúrgicamente. El lunes, antes de conocer el alcance de su lesión, comentó en privado y en tono irónico: "Alguien del Barça me ha echado mal de ojo".
La operación consistió en la extracción del menisco interno y la reparación sustitutiva del ligamento roto con un tendón que en el futuro pueda cumplir la misma función, lo que en términos médicos se conoce como plastia (reconstrucción de una estructura determinada que ha sido objeto de traumatismo). "El ligamento cruzado anterior, a diferencia de otros, no vuelve a unirse por sí mismo una vez roto, por lo que es preciso aplicar esta técnica", explicó Miguel Angel Herrador, jefe de los servicios médicos del Real Madrid.El doctor Herrador manifestó que la operación había sido satisfactoria. En su opinión, el centrocampista del Real Madrid podría volver a los entrenamientos en un plazo de cinco meses y regresar a los terrenos de juego un mes después.
José Martínez Pirri, el médico que suele acompañar al equipo en sus desplazamientos, sospechó lo peor nada más reconocer en el terreno de juego a Milla, después de que éste, en un giro, notara un crujido en la rodilla y un intenso dolor.
"Lo lleva bien, pero está muy triste, sobre todo porque no esperaba algo así después de haber superado los problemas personales que ha soportado durante meses y los trastornos psicológicos que le han producido", añadió Herrador sobre su paciente.
Milla se mostró abatido en la habitación 219 de la clínica Santa Elena, donde fue operado. El jugador, acompañado de su novia y de su madre, María Aspas, se negó a hacer declaraciones. "Está hundido, por eso voy a estar aquí con él todo el tiempo que me necesite", comentó la madre a su llegada al centro médico, acompañada por Michel y Parra. Ramón Mendoza, presidente del Madrid, habló telefónicamente con el futbolista en la mañana de ayer para interesarse por su estado.
El técnico John Toshack, que visitó a su pupilo por la tarde, antes de que entrara en el quirófano, declaró: "No creo que nadie se pueda alegrar de lo de Milla". Las palabras del entrenador galés hicieron referencia a la frase que el vicepresidente del Barcelona, Joan Gaspart, pronunció cuando Milla abandonó el club azulgrana: "Le deseo al jugador lo mejor: todos los fracasos deportivos posibles". Toshack se mostró preocupado por la baja de Milla: "Es un auténtico palo".
