La venta de Enasa sigue en el aire tras vencer el plazo fijado con Daimler para cerrar un acuerdo

El plazo convenido entre el INI y el grupo alemán Daimler Benz para ultimar la venta de Enasa concluyó ayer, 30 de julio, sin que ninguna de las dos partes hicieran público el desenlace de las negociaciones, cuyo objetivo final es encontrar un nuevo inversor que sustituya a MAN en el proyecto de compra de la empresa española, fabricante de los camiones Pegaso. En definitiva, el futuro de Enasa sigue en el aire, sin que ello implique la ruptura de las negociaciones que mantiene en solitario con Daimler. El INI, por su parte, ve frustrado de momento su proceso de internacionalización por esta vía, basado en tomar participaciones en grupos europeos. En este caso estaba previsto el 8% de MAN y no se ha podido trasladar a la otra firma alemana, Daimler.

Tanto el Ministerio de Industria como el Instituto Nacional de Industria (INI) manifestaron ayer que no disponían de ninguna noticia sobre las negociaciones dirigidas por Daimler Benz en busca de un potencial socio que colabore en la compra de Enasa. Fuentes del Ministerio de Industria recordaron, no obstante, que el grupo alemán mantiene contacto directo con el INI, a través de su presidente, Jordi Mercader y de su director general, Ángel García Altozano. En este sentido, aunque el portavoz del holding público mostró su confianza en que hoy o, en el peor de los casos, mañana, día 1 de agosto, el grupo alemán avance el resultado de las negociaciones, se teme que éstas se alarguen hasta el otoño.En medios oficiales españoles se baraja también la hipótesis de que, ante la premura de tiempo, el grupo alemán decida finalmente asumir la totalidad del 80% de las acciones de Enasa que el INI ha puesto a la venta y que, en un principio, se distribuían entre un 20% para la propia Daimler y un 60%. para MAN AG. La confianza española proviene del apoyo que ha prometido el gobierno alemán tras las presiones del español tras la retirada de MAN y la sospecha de que Daimler hiciera lo mismo. El gobierno alemán, que apostó fuerte en la adjudicación, ha reconocido, según fuentes españolas inmersas en la negociación, su implicación y ha recomendado a Daimler una buena disposición.

MAN se descolgó del acuerdo alcanzado a finales del pasado año con el INI a raíz de la negativa del Bundeskartellant (oficina antimonopolio de la RFA) que prohibió la integración de las dos empresas alemanas en la misma operación de compra. La decisión de la oficina antimonopolio de Berlín fue respaldada por el comisario comunitario de la Competencia, Leon Brittan.

Daimler busca otro socio

DaimIer y MAN, no obstante, mantienen desde hace años una colaboración que, de hecho, implica la formación de un consorcio dentro del sector de automoción, con el consiguiente riesgo para el desarrollo de la libre competencia. Enasa representaba, en este sentido, el vértice donde confluían las estrategias conjuntas de las dos multinacionales, por lo que tanto las autoridades alemanas como la CE pusieron en entredicho el acuerdo con el INI.Sin embargo, la decisión de ambos organismos no impide que la firma española sea adquirida por una sola de las empresas alemanas como es el caso de Daimler.

A partir de ese momento, la única alternativa viable para la venta de la empresa española pasa necesariamente por DaimIer Benz, ya que el Gobierno español no parece dispuesto a reanudar una ronda abierta de negociaciones que podría alterar sensiblemente el precio de Enasa en contra de los intereses del INI.

DaimIer asumió, en principio, el desafío que ahora supone la compra de la empresa española, pero la firma alemana desea compartir el riesgo con algún otro inversor antes de tomar una decisión que pueda resultar irreversible. Sin embargo, las negociaciones de Daimler con el INI han buscado la obtención de contrapartidas si se queda con Enasa.

Esas contrapartidas también se han mantenido ocultas. Lo que parece seguro, además, es que el INI va afracasar en su primer intento de internacionalización, basado en tomar el 8% de MAN. Trasladar ese intento a DaimIer no formaba parte de la nueva estrategia, por la propia postura de la firma alemana.

Los sindicatos han criticado la situación. Para CC OO el acuerdo era bueno, "pero se han fiado y han perdido una oportunidad que, en definitiva, puede suponer la desaparición de la empresa, que se encuentra en situación de intirinidad permanente" y con pérdidas superiores a los 5.000 millones de pesetas en el primer semestre".

Entre los potenciales inversores, la prensa alemana ha destacado en los últimos días el nombre de Volkswagen, que mantiene excelentes relaciones con el INI a raíz de la compra de Seat.

En cualquier caso, ni Daimler ni el INI pudieron asegurar ayer ninguna solución que despeje el futuro de Enasa. De ahí que los más optimistas se inclinen por una venta del 80% de Enasa a DaimIer que luego proseguiría sus contactos en busca de ese tercer socio.