_
_
_
_
Tour 90

Lemond y Pensec retan a Chiappucci tras fracasar en la contrarreloj

"Chiappucci está solo. No tiene un equipo tan potente como yo y ahora debe asumir la presión de llevar el maillot amarillo". Ronan Pensec: aún no se da por vencido, aunque parezca estarlo, pero asumió totalmente su fracaso en la contrarreloj, lo mismo que su jefe Greg Lemond. La jornada de gloria del L'Alpe d'Huez se tornó en derrota para el equipo Zeta en Villard-de-Lans. El campeón del mundo y último ganador del Tour ha perdido claramente tiempo respecto a sus rivales en las dos etapas contra el cronómetro, que, en principio, debían darle ventajas. "No estoy al ciento por ciento de mi forma, es evidente", confesó escuetamente el norteamericano.

Más información
Breukink: "Hay que ser prudente hasta París"

Greg Lemond, el ganador de 1989, ha perdido la sonrisa de los primeros días y más aún porque, sin estar en su mejor momento, debe tomar ya la responsabilidad del liderato en el equipo Zeta en lugar de un acabado Pensec. El francés, líder por dos días, esperaba más que nadie la jornada de descanso de ayer para reponer fuerzas: "Yo sólo quiero pensar en descansar para poder volver al combate, en los Pirineos o incluso antes. Chiappucci me saca sólo 1.17 minutos, y no tiene mi equipo". A esta frase, sin embargo, el italiano ya ha respondido: "De acuerdo, yo no tengo tanto apoyo como Pensec, pero sí el suficiente para las etapas fáciles antes de los Pirineos. Mi equipo trabaja en llano como el que más. Y en la montaña, no importa. Ahí tiene que subir uno solo, porque no vale otra cosa. Está bien tener un Millar para una etapa, pero ya se vio que aún así Pensec llegó mal al Alpe d'Huez y lo acusó al día siguiente".Otras opiniones .

Precisamente sobre la jornada de descanso habló ayer Cyrille Guimard, el director del Castorama huérfano de líderes y de aspiraciones, algo muy raro en él, después del abandono de Fignon. Ya había avisado sobre las posibilidades de Chiappucci y ahora se ha referido al peligro del día posterior al descanso, porque si éste no ha sido activo puede dar lugar a desfallecimientos importantes. El cuerpo del corredor, acostumbrado a grandes esfuerzos diarios, se anquilosa si no se mantiene un ritmo parecido y puede no responder al exigírsele de nuevo. "La historia está llena de hundimientos por esta razón", señala Guimard, que recuerda la tendencia de los corredores a no rodar suficientemente este día y a relajarse con visitas familiares o conferencias de prensa.

Confirmado el hundimiento de Mottet, el gran fracasado de la contrarreloj fue Gianni Bugno, vencedor el día anterior en L'Alpe d'Huez. Bugno admitía que no estaba en forma: "Jamás pensé en perder tanto tiempo. No creo que los esfuerzos anteriores hayan sido la razón, sino mi propia forma. Me cuesta estar a la altura del Giro. Pero no quiero pensar más en ello. Como dije el primer día en Futuroscope, el Tour es muy largo y yo he venido a intentar hacerlo lo mejor posible. Unas veces me ha salido bien y otras menos. Aún queda una semana y vamos a ver qué pasa".

El holandés Steven Rooks está huérfano sin Theunisse. Se encuentra a ocho minutos de Breukink al final de los Alpes. La diferencia entre los dos holandeses es enorme. Rooks no es el mismo de otros años en que sus relevos con Theunisse favorecían a ambos. Se está demostrando que hay corredores minusválidos a gran nivel cuando corren solos. En cuanto a Alcalá, ha recuperado parte de la moral que se fue con sus fuerzas en medio de los Alpes. Va a ayudar a su compañero de equipo Breukink, pero sólo si éste responde. Y como casi todos los perseguidores, espera que Chiappucci y Pensec acaben por caer en los próximos envites.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_