El 'comando Donosti', autor de nueve asesinatos, tres de ellos de ancianos
A. I. El comando Donosti, reorganizado en el último año, tras la desarticulación del anterior con la muerte de Mikel Castresana, Paterra, en la plaza de Guipúzcoa en septiembre de 1988, ha cometido, desde su puesta en funcionamiento, nueve asesinatos, tres de ellos a ancianos. La primera muerte que tiene en su haber este comando es la de Gregorio Caño, conductor del industrial Joaquín Aperribay, al que ETA pretendía secuestrar.
El comando está formado, según expertos de la lucha antiterrorista, por dos grupos: uno de liberados, encargados de cometer las acciones mortales, y otro de legales, que llevan a cabo los atentados con explosivos.
Los actos terroristas cometidos por este grupo se circunscriben al área de San Sebastián, y lo convierten en el más peligroso de la organización armada. El comando Donosti es el que mayor número de atentados con víctimas ha realizado en los últimos tiempos. Todos los disparos que efectúan se realizan a escasa distancia, por la espalda y en la cabeza.
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