Suárez: "Intentaremos ser campeones"

Luis Suárez, máximo responsable técnico de la selección, ya empieza a sacar pecho, aunque moderadamente. "España ya ha cumplido su objetivo de clasiflicarse para los octavos de final", declaró ayer el selecciomiador, pero el técnico está convencido de que sus hombres pueden superar el listón. De ahí que ayer declarara: "Estamos aquí para intentar ser campeones". Los jugadores se mostraron más comedidos que su entrenador, a pesar de haber recibido un incentivo importante: un talón die cinco millones de pesetas para cada uno. Esta cifra era el premio pactado con la federación por la clasificación. Naturalmente, Suárez ha recibido el doble.

La selección vivió ayer un día de cobro y declaraciones de principios. Cada jugador recibió un talón nominal por importe de cinco millones de pesetas. La federación no ha tardado ni siquiera 24 horas en hacer efectivo el premio pactado antes de salir de Madrid y, tiene preparados los talones de los próximos premios, con el Fin de que el tema monetario no pueda ser un argumento desestabilizador.Y es precisamente de desestabilización de lo que habló ayer Suárez. El seleccionador sigue todavía "quemado" por las críticas recibidas: "Han existido muchas tentativas para desestabilizar y destruir la armonía del grupo. Ahora la situación está un poco calmada, pero no acabará aquí. Por suerte, ya hace días que leo poco los diarios, pero han salido mentiras en todos los sitios. Desde jugadores que practican el boxeo, hasta que el equipo lo ha hecho todo el mundo menos yo".

Suárez explicó las razones por las que realizó varios retoques en la alineación y también en el sistema táctico, tras empallar frente a Uruguay. Puso énfasis en sus argumentos para que nadie dudara: "Los uruguayos juegan con dos extremos, mientras que coreanos y belgas lo hacen con un hombre en punta y otro retrasado. Ahí radicaron los cambios que hice. El sistema ya lo habíamos probado en otras ocasiones y es posible que siga repitiéndolo porque la mayoría de los equipos juegan así. Además, cuando las cosas funcionan, te cuesta mucho hacer cambios".

Gracias a los suplentes

Según el seleccionador, los jugadores considerados suplentes están asumiendo bien sus situación: "Entiendo que para la mayoría de ellos representa un sacrificio enorme estar en el banquillo, ya que son titulares en sus respectivos clubes. Pero ellos lo comprenden, incluso Manolo y Jiménez recibieron públicamente explicaciones por no jugar. Formamos un grupo muy unido y todos asumimos nuestra responsabilidad para bien o para mal".

Suárez está convencido de que la selección todavía no ha dado la medida de sus posibilidades: "Hemos cumplido los objetivos que nos fijamos al salir de Madrid. Clasificarnos para los octavos de final era lo mínimo que podíamos hacer, pero no nos vamos a parar. Estamos aquí para intentar ser campeones y no para igualar el excelente papel que se hizo en México. Tenemos equipo para pelear con cualquiera".

A pesar de su optimismo, el técnico cree que sus hombres deben pulir muchos defectos: "Hemos de buscar nuestra propia identidad y corregir muchos errores. Este es un equipo que no sabe defender, que no quiere quedarse y hasta ahora, cuando se ha echado hacia atrás porque el rival apretaba, ha defendido demasiado cerca del área. También hay excesiva prisa por iniciar el contraataque y un ejemplo palpable fue el partido contra Bélgica. Pudimos machacar y no supimos hacerlo. Al final pasa mos apuros".Nada de suerte

Suárez no acepta la tésis de que la fortuna esté con la selección y muy especialmente en los penaltis: "¿Qué pasa? Parece que para algunos no hemos hecho nada. El tema de los penaltis no es cuestión de suerte. Los errores los han cometido ellos".

El técnico todavía no ha comenzado a estudiar a fondo al próximo rival, Yugoslavia. Para Suárez el partido amistoso que se disputó frente a los yugoslavos durante la fase de preparación no sirve de punto de referencia: "No tiene nada que ver. Ahora es todo distinto y por eso quiero analizar los informes de mi ayudante Santisteban. Una cosa tengo clara: no debemos tenerles miedo. Nuestras posibilidades son inmensas. Los yugoslavos son buenos individualmente, pero les falta continuidad en su juego; son bastante anárquicos y si seguimos jugando con seriedad, ganaremos".