Declaración conjunta hasta tres millones de ingresos

En el nuevo impuesto sobre la renta los contribuyentes podrán elegir, igual que desde el pasado año, entre presentar su declaración de forma individual o conjunta. Sin embargo, según las diferentes tarifas propuestas, la declaración conjunta será más aconsejable para los matrimonios cuyos ingresos totales no superen los tres millones de pesetas, cualquiera que sea la distribución entre los dos cónyuges de la renta familiar global. En este tramo de ingresos se encuentran, según la última declaración presentada, un 87% de los contribuyentes.Por encima de los tres millones de pesetas, la ventaja de una u otra opción dependerá de lo que cada cónyuge aporte al conjunto de ingresos de la unidad familiar.

Para la imputación de las rentas, el libro blanco de la reforma señala que ésta no tiene porqué plegarse al Código Civil; es decir, que tanto si el matrimonio se ha casado en régimen de gananciales como si está en separación de bienes, los ingresos pertenecerán a quienes los ha obtenido a efectos del IRPF.

Se descarta, por tanto, la posibilidad de implantar un sistema splitting -sumar las rentas, dividirlas por dos para aplicar la tarifa y volver a multiplicar por dos para calcular la cuota- o de cociente (quotient) familiar -la tributación es menor a medida que aumenta el número de miembros de la unidad familiar-.La razón de no contemplar estos sistemas de promediación de rentas es, según el libro blanco, que "benefician exageradamente a familias de renta alta con un solo perceptor y limitan la progresividad del impuesto".