El consumo de drogas es más alto en el centro

, Los vecinos de San Blas consideran que su distrito es el peor en cuanto a venta y consumo de drogas. Los de Chamartín, por el contrario, creen que su barrio está limpio. Sin embargo, un estudio municipal sobre el consumo de estupefacientes demuestra que ambos están equivocados y que la droga está radicada principalmente en los distritos más céntricos de Madrid. El informe revela que 10.000 madrileños son adictos a la cocaína o la heroína, y que los menores de 19 años son los más, ardientes partidarios de la prohibición de los estupefacientes.

Todas las estimaciones subjetivas realizadas hasta ahora sobre la distribución del consumo de la oferta y la demanda de drogas en Madrid han resultado equivocadas, según un informe elaborado para el Plan Municipal Contra las Drogas. Los estupefacientes están más arraigados en distritos como Centro, Arganzuela, Salamanca, Retiro, Chamberí, Moncloa, Tetuán y Chamartín.Los distritos periféricos de Usera, Villaverde, Vallecas y Hortaleza son de consumo medio, y el resto de áreas periféricas, de bajo, aunque éstas "constituyen un importante espacio de venta de droqas".

Según el estudio, dirigido por el sociólogo Domingo Comas y el profesor de Ciencias Politicas Francisco Alvira, se revela una necesidad de modificar los estereotipos sobre las drogas". Así, hay distritos como San Blas, donde se produce un alto grado de victimización -percepción subjetiva del problema- entre sus habitantes que no se corresponde con las tasas reales de consumo. Por contra, hay zonas con mayor índice de drogadicción donde sus vecinos "se resisten a que su barrio sea etiquetado como conflictivo". Es el caso de Chamartín.

Entre 8.000 y 10.000 madrileños, afirma el informe, son consumidores habituales de heroína y cocaína, y unas 50.000 personas más lo son de hachís -sustancia que ha probado uno de cada cuatro madrileños-, aunque la demanda de drogas ilegales triplica el consumo actual.

En comparación con otras ciudades europeas, en Madrid está altamente extendido el consumo de hachís, "hasta el punto de duplicar y triplicar el de otras capitales". El consumo comparativo de heroína, sin embargo, "es medio-bajo". Madrid, en este capítulo, es ampliamente superada por Amsterdam, Roma y Londres.

La mayoría de los adictos obtuvieron por primera vez la droga a través de un amigo a los 20 años, en el caso del hachís y la heroína, y a los 22, en el de la cocaína. Un 10% de los heroinómanos comenzó antes de los 15 años. Aquel primer acercamiento a la droga se produjo, en la mayor parte de los casos, en la calle (el caso del hachís y la heroína) o en una fiesta o reunión (cocaína)

Los autores del informe consideran determinantes del consumo el sexo y la edad de la persona. Según sus conclusiones, el grueso de los adictos son varones de entre 20 y 30 años. Consideran también como factores de riesgo: "muchas horas de ocio' fuera del hogar, un trabajo estable, la carencia de compromisos familiares y, para el caso de la cocaína y la heroína, ser estudiantes".

Jóvenes prohibicionistas

Los menores de 19 años, junto a los mayores de 45, se han mostrado los menos tolerantes con el consumo y venta de drogas. Así, el 75% de los más jóvenes prohibirían la cocaína y el 80% la heroína. Sin embargo, el sector comprendido entre los 20 y los 24 años sólo es partidario de su prohibición en un 61 % y un 68%, respectivamente 1 porcentaje que desciende aún tres puntos más entre los que tienen entre 25 y 29 años.

El alcalde de Madrid, Agustín Rodríguez Sahagún, destacó que Madrid, "siendo el lugar donde más adictos y tráfico hay es donde menos actuaciones tiene la policía". Por su parte, el concejal socialista Eugenio Morales subrayó que "nos encontramos con la paradoja de que los barrios que rechazan los centros de atención a drogodependientes (CAD) son los lugares que más los necesitan",