_
_
_
_
_

La concentración de polen provoca crisis alérgicas a más de cien niños

Luz Sánchez-Mellado

Las condiciones meteorológicas que se están produciendo estos días en Madrid, con temperaturas altas, humedad elevada, viento y tormentas ocasionales, han ocasionado un pico en los casos de crisis asmatico-alérgicas por polen en la capital, que hasta el momento ha tenido su techo en la noche del pasado miércoles, en la que más de cien niños tuvieron que ser atendidos en urgencias de los hospitales madrileños. Los ingresos se produjeron tras una tormenta que provocó una lluvia intensa en la ciudad durante más de dos horas.A pesar del gran número de casos de crisis alérgicas polínicas que se atienden en los últimos días, casi todos los pequeños afectados mejoran de su afección en cuanto son medicados con soluciones broncodilatadoras en el departamento de urgencias y no precisan ingresar en el hospital.

En estas fechas se produce tradicionalmente la polinización de las plantas gramineas -grama, centeno, espiguilla, haya- y del olivo, que ataca con especial virulencia a los niños diagnosticados como alérgicos polínicos o genéticamente predispuestos a sufrir este tipo de afección, que es mucho menos frecuente en los adultos.

Según datos del Departamento de Contaminación Atmosférica del Ayuntamiento, en la última semana se han disparado los niveles de polen en suspensión en el ambiente.

Pasa a la página 2

Las altas temperaturas de los últimos días provocan cientos de casos de alergias en niños

Viene de la primera páginaEn la última semana se ha llegado a medir 890 gramos de polen por metro cúbico en el observatorio municipal de la Plaza de Castilla, una cifra considerada altísima por los expertos en comparación con los 50 o 100 gramos por metro cúbico estimados como aceptables.

Fiebre del heno

Según la doctora María Teresa Laso, jefa del Servicio de Alergias del Hospital del Niño Jesús, "todos los años por estas fechas se observaba un aumento espectacular en los casos de crisis asmáticas por alergia al polen; lo que ocurre es que este año nos ha sorprendido la prontitud con que se ha producido, ya que ésta está siendo una primavera convencional, con calor en mayo y lluvias en abril, y no la especie de invierno prolongado hasta junio que hemos venido soportando en años anteriores, con lo que la gente se había olvidado un poco de la popular fiebre del heno".

La doctora Laso precisa que "no hay que confundir la alergia con las molestias que nos produce la pelusa o los pequeños trocitos amarillos que caen de los árboles, ya que estas partículas no son el polen de la planta, que es de tamaño microscópico e inapreciable para el ojo humano, y, además, la polinización de las plantas arbóreas se produce en los meses de febrero y marzo".

Según Laso, no tienen fundamento clínico las protestas de algunos vecinos, como los de la UVA de Hortaleza, que se han quejado al Ayuntamiento por la gran cantidad de partículas, que se desprenden en estas fechas de las ramas de los chopos de sus calles, que no han sido podados. La jefa del Servicio de Alergias del Hospital del Niño Jesús afirma que la planta que origina el polen puede estar a kilómetros de distancia del lugar de residencia, juego o estudio de los niños. "Por ello", señala la doctora, "no debe impresionarnos la cantidad de corpúsculos amarillos acumulados en el suelo o que caen de los árboles, ya que estas partículas pueden provocar molestias pero no alergias, dado que, por su gran tamaño, no pueden ser asimiladas por las mucosas".

"Lo que sí deben evitar los padres de los niños diagnosticados como alérgicos polínicos, o que sean especialmente sensibles a estas partículas en suspensión, es llevar a sus hijos a parques, jardines o lugares con plantas gramíneas y olivos; también se debe procurar que los pequeños viajen en automóvil y duerman con las ventanas bien cerradas para evitar su exposición al polen transportado por el viento", añade María Teresa Laso.

Escozor

A pesar de esta importante diferencia entre la alergia polínica que deriva en crisis asmáticas y los sencillos episodios alérgicos que provocan cuadros de rinoconjuntivitis, las farmacias madrileñas también han notado un incremento de la demanda de medicamentos antihistamínicos, que los ciudadanos suelen comprar al menor síntoma de picor o escozor de nariz o garganta.

Sólo en el caso de la alergia asmático- polínica los medicamentos suelen ser recetados individualmente para cada paciente, dada la multitud de peculiaridades de estas afecciones.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Sobre la firma

Luz Sánchez-Mellado
Luz Sánchez-Mellado, reportera, entrevistadora y columnista, es licenciada en Periodismo por la Universidad Complutense y publica en EL PAÍS desde estudiante. Autora de ‘Ciudadano Cortés’ y ‘Estereotipas’ (Plaza y Janés), centra su interés en la trastienda de las tendencias sociales, culturales y políticas y el acercamiento a sus protagonistas.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_