Revilla califica de "grave error" la decisión de detener a Aguirre

El empresario Emiliano Revilla imputó ayer al juez Carlos Bueren, que instruye el denominado sumario de los intermediarios, haber cometido "un grave error" con la detención del negociador Rafael Aguirre, "cuya única acción reprochable fue ayudar a mi familia en todo lo que le pidieron". Revilla difundió un comunicado de apoyo a Rafael Aguirre en el que mostró su contrariedad por la labor del juez Bueren y aseguró que "la pesadilla" que constituyó su secuestro a manos de ETA "parece que hoy, para nuestra desgracia, aún no ha acabado".El empresario dio un puñetazo en la mesa y se le saltaron las lágrimas cuando al término de la lectura del comunicado afirmó -que por Rafael Aguirre "daría hasta mi vida". "Ojalá" añadió, "se me brindara hoy la posibilidad de compartir con él estos dolorosos momentos".

Rafael Aguirre fue detenido ayer por orden del juez Carlos Bueren, e ingresó a medianoche en la prisión de Carabanchel. El intermediario, que reconoció haber alquilado una furgoneta en la localidad francesa de Bayona para trasladar los 750 millones de pesetas correspondientes al primer intento de pagar el rescate, se negó a contestar a medio centenar de preguntas relativas a personas, contactos y actividades realcionadas con su actuación, acogiéndose a su derecho al silencio. El juez deberá decidir en un plazo de 72 horas si eleva la detención a prisión o le pone en libertad.

Revilla, pese a todo, dijo que no se sentía "indignado" con el juez: "Yo sobre el juez no puedo juzgar. Le respeto". El empresario expresó en otro momento su ,,apoyo incondicional" a cuatro de los intermediarios. Además de Aguirre, alabó la intervención de los hermanos Txornin y Vicente Estrada y de Iñaki Aseguinolaza.