Pujol reivindica ante el Príncipe que Cataluña no sea un componente subordinado de España

El presidente de la Generalitat, Jordi Pujol, reinvindicó ayer ante el príncipe Felipe de Borbón una vertebración de Cataluña en España en la que la primera no deba supeditar ninguno de sus aspectos esenciales. "Cataluña no puede ser un componente subordinado de España, ni su presencia ser vergonzante; no puede ser un país que su lengua, su nacionalidad y su historia tengan que estar subordinadas" dijo el dirigente nacionalista en Gerona, antes de mostrar su confianza en que "la rectificación de algunos aspectos de la historia de España se mantendrá, pese a las dificultades con que se tropieza para reconocer nuevamente las diversas personalidades que han ido configurando el conjunto español".En su segunda jornada de estancia en Cataluña, Felipe de Borbón visitó el Ayuntamiento de Barcelona, la ciudad de Gerona, el monasterio de Montserrat y asistió por la noche a un concierto en el Palau de la Música de Barcelona. El acto más importante de la jornada fue la visita a la ciudad de Gerona, de donde Felipe de Borbón ostenta el título de Príncipe. En su previa estancia en el Ayuntamiento de Barcelona, Felipe de Borbón firmó en el libro de honor como Príncipe de Gerona, título que ha utilizado habitualmente estos días, aunque se ha excluido una ceremonia de investidura formal.Desde el nacionalista Pujol hasta el alcalde socialista de Gerona subrayaron el carácter de pacto que hace posible la vertebración de Cataluña en España y el papel garante que en esta relación juega la Monarquía. Todas las autoridades catalanes interpretan el viaje del Príncipe y el uso de sus títulos catalanes como una expresión de la continuidad de este pacto constitucional.

Pujol manifestó ante el consistorio gerundense que la Corona debía asumir la historia de os catalanes en su totalidad. "La Cataluña que forma parte de España no puede ser nada más un trozo de Cataluña o un trozo de su historia; tampoco una versión particular, sino que debe ser toda ella", señaló.El futuro

El dirigente nacionalista hizo votos para que las relaciones de la Generalitat con la Corona tengan éxito en el presente y en el futuro, y confió en que se mantenga "la rectificación de algunos aspectos de la historia de España". "Se trata", dijo, "de recuperar todas las identidades, de recuperar todas las fidelidades y al mismo tiempo recuperar todos los motores de energía, todas las voluntades, todos los valores".

El Príncipe, que conocía con anterioridad el discurso de Pujol, le contestó que Cataluña y España forman parte de un sistema de vasos comunicantes y que su visita al Principado es "una pieza del engranaje que nos conduce a todos a aceptarnos, a abrazarnos, a trabajar a partir de todo lo que somos, sin postergaciones ni rencores", y le recordó que es verdad que Cataluña había padecido muchas negaciones durante años, pero que éstas también se sufrían en el resto de España.

El alcalde de Gerona, el socialista Joaquim Nadal, señaló que las esencias del pacto constitucional son el enraizamiento del papel de la Monarquía como garantía de la consolidación democrática y el predominio de todas las libertades. "Desde Gerona y desde Cataluña no sabríamos interpretar la Monarquía de otra manera; el pacto soberano, la libre voluntad popular, la transición democrática sitúan a la Monarquía corno una pieza clave del actual ordenamiento político en relación directa con el pacto".

Felipe de Borbón resaltó los lazos entre la Corona y Cataluña y dijo que constituyen "el centro mismo de la armonía constitucional". El Príncipe realzó la voluntad pactista de los catalanes con estas palabras: "El pacto es la fuerza, porque es la libertad con responsabilidad".

El heredero de la Corona se refirió también al terrorismo. "Nada justifica", subrayó, "que en nombre de unas ideas se practíque el asesinato, la violencia y sobre todo no se justifica aquí [en España], donde la bien estructurada Constitución, con los estatutos de autonomía y el carácter democrático que manifiesta la sociedad, permiten la exposición absolutamente libre de cualquier proyecto. La democracia expresa sus proyectos por medio de las urnas".

Por la mañana, durante la visita del Príncipe al Ayuntamiento de Barcelona, el alcalde Pasqual Maragall tributó un recuerdo a los barceloneses que lucharon en el siglo XVIII contra Felipe V. "Nosotros", dijo, "somos los sucesores de aquellos que en el año 1714 salieron de aquí a luchar contra un rey que nos suprimió como Consell de Cent por un decreto injusto [el de Nueva Planta]. Pues bien, es un honor para nosotros rendiros homenaje como heredero del Rey que como pueblo hemos votado con la Constitución y aceptamos".