El papel del comunismo

La perestroika no ha conseguido evitar que EL PAÍS asuma la modernidad de Ronald Reagan cuando dijo que "la Unión Soviética es el imperio del mal". He leído en México el editorial del 19 de marzo -titulado Hispanocomunismo- en el que EL PAÍS recomienda al PCE el "regreso a la tradición reformista" porque "el comunismo ha fracasado". El editorialista asegura que "el mal estaba en el origen". Y cita a Yuri Afanasiev para considerar indlscutible que Lenín "sentó las bases de una política estatal de violencia y terror". Leído ese editorial en América Latina, me sugiere que tal vez sean leninistas Pinochet, Videla o los asesinos de Ellacuría.Lenin decía que cuando falla la organización se le echa la culpa a la ideología. Si Ceaucescu era el comunismo, ¿por qué no es Pinochet el capitalismo? ¿Tampoco es Hiroshima el capitalismo? ¿Es leninista Amedo? ¿Lo son quienes decidieron organizar los GAL? ¿No tiene nada que ver la economía de mercado con el tráfico de niños latinoamericanos hacia Estados Unidos, la Comunidad Europea e Israel?

Ese editorial se merece las palabras de Joaquín Estefanía publicadas en el mismo día a sólo dos páginas de distancia: "Hay veces que la Prensa ofrece ejemplos que demuestran cómo el periodismo puede ser puesto al servicio de intereses ajenos a los de los lectores".

Tiene razón Anguita si ha dicho que el papel dirigente del PCE es más necesario que nunca. Y tiene razón EL PAÍS cuando dice en ese editorial que los comunistas tenernos "unos fines específicos, diferentes de los compartidos por la mayoría de la sociedad".-