El Madrid, dispuesto a 'condenar' a Cruyff
Real Madrid y Barcelona viven en dos mundos diferentes las horas previas a la final de la Copa del Rey, que esta noche se jugará en Valencia (20.00, TVE-1). El Madrid está casi tocando el cielo, consciente de que en 72 horas puede sumar dos títulos, y dispuesto a firmar la condena del técnico azulgrana, Johan Cruyff. El Barcelona se encuentra al borde del infierno, con un presupuesto de 5.225 millones que puede servirle únicamente para pagar el postre del año. La Copa, por primera vez en muchos años, tiene morbo. Es una muerte súbita con todos los ingredientes para convertirse en un espectáculo de fútbol-pasión.
Hugo Sánchez definió así el estado de ánimo del Madrid ante la final de hoy: "La Copa nos va a servir para brindar por la Liga". Esa es la imagen pública, refrendada ayer en un entrenamiento en el que todo era broma, todo sonrisas. "Este partido no es más que la culminación de una competición devaluada", dijo el presidente blanco Ramón Mendoza, quien añadió: "La Liga es más importante, porque significa jugar la Copa de Europa". "El ganador de la Copa no es siempre el mejor", repetían Michel y Mendoza, como si de una consigna se tratase. "No es para cubrirnos", prosiguió el presidente, pero en la Liga eso no ocurre' La imagen privada es muy distinta. El Madrid es un equipo que disfruta con la victoria, pero que este año, por su gran superioridad, ha tenido pocas oportunidades de vivir emociones como la de hoy. Contra el Barcelona, además, ha tenido serios problemas: perdió en el Camp Nou, 3-1, y ganó en el Bernabéu, 3-2, con apuros. "El Barcelona siempre es peligroso", dijo el técnico gales John Toshack.En el Barcelona, por contra, la imagen pública coincide con la privada. Hay tensión. Tensión entre los directivos, asustados por lo que pueda suceder esta noche. Tenssón entre los jugadores, sabedores de que su prestigio se juega en un partido. Quizá quien menos tensión sufra sea el técnico Johan Cruyff, curiosamente quien ha puesto a sus hombres entre la espada y la pared, y quien se juega su futuro esta noche.
Cruyff no se mostró preocupado por el hecho de que el Madrid tenga más apoyo en las gradas -"hemos jugado media Liga en campo contrario"-, ni tampoco por el caso Milla: "Es un chico joven que no ha sabido superar un morriento de tensión. Mi único consejo es que debe seguir trabajando". La única preocupación de Cruyff se centra en la facilidad que tiene el Madrid para marcar: "Necesita muy pocas oportunidades. Es básico conseguir que sus jugadores no rindan al máximo".
Las claves
El partido presenta las suficientes claves como para convertirlo en apasionante. Una de ellas es Julio Salinas, si finalmente el imprevisible Johan Cruyff le incluye en la alineación. Tanto en el Camp Nou como en el Bernabéu, la defensa madridista, especialmente el estático Ruggeri, fue incapaz de controlar a Salinas. Toshack insiste en que no ha preparado nada especial para su marcaje. Nadie se lo cree.En la otra trinchera, Cruyff, finalmente, ha apostado por la seguridad defensiva, probablemente con López Rekarte y Aloisio como marcadores, Alexanco como libero, y Koeman por delante. Habrá que ver cómo se hace el reparto de marcajes, porque Aloisio se ha demostrado poco imaginativo para frenar la improvisación de Butragueno.
En el centro del campo, la batería de creadores madridistas Michel, Martín Vázquez, Schuster y Gordillo- se encontrará con un cuarteto trabajador.
Eusebio, Amor, Bakero y Roberto- que le ha causado serios dolores de cabeza cuando se ha puesto a picar piedra. De la resistencia del Madrid para superar la presión azulgrana puede depender el resultado de la final.
Sobrevolando el césped estará el fantasma de Milla, el gran ausente. Esa es otra de las diferencias hoy entre el Madrid y el Barcelona. Martín Vázquez, en una situación similar, está cuajando la mejor temporada de su vida. La apuesta de Cruyff es muy fuerte. Se lojuega todo a doble o nada, a póquer o farol.
Alineaciones probables:
Real Madrid: Buyo; Chendo, Hierro, Ruggeri, Sanchis; Michel, Schuster, Martín Vázquez, Gordillo; Butragueño y Hugo,
Barcelona: Zubizarreta; López Rekarte, Alexanco, Koeman, Aloisio; Eusebio, Amor, Roberto; Julio Salinas o Laudrup, Bakero y Beguiristain.
Arbitro: García de Loza.
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