El Gobierno muestra a Cuba su "profundo malestar" por las declaraciones de Fidel Castro sobre el Rey

El subsecretario de Asuntos Exteriores, Inocencio Arias, comunicó ayer al embajador de Cuba, Luis Méndez Morejón, el "profundo malestar" del Gobierno español por las recientes declaraciones del presidente de esta nación, Fidel Castro, en las que se preguntaba quién eligió al rey de España y retaba a que se entreguen armas a vascos, catalanes y gallegos. Exteriores y el embajador cubano dieron por zanjado el incidente tras esta protesta. El titular de Exteriores, Francisco Fernández Ordóñez, tachó las manifestaciones de Castro de "desafortunadas y lamentables".

El embajador cubano, Luis Méndez Morejón, atribuyó el problema diplomático causado a que se habían sacado fuera de contexto las palabras de Fidel Castro, que, según su versión, nunca quiso atacar al Rey ni hacer un llamamiento a las armas, y que todo se había debido a un malentendido.El subsecretario de Exteriores recibió a mediodía de ayer en el Palacio de Santa Cruz al embajador de Cuba, quien había sido convocado por las reiteradas afirmaciones de Castro en las que para justificar el carácter democrático del modelo cubano se preguntó quién elegía a los reyes, y entre otros citó a don Juan Carlos.

Fidel Castro realizó comentarios irónicos sobre las monarquías española y británica [ver EL PAÍS del pasado día 17] y se preguntó si las elecciones en España son libres. Entonces agregó: "Por que las de España son libres y las nuestras, no? En España no hay voto directo. Incluso en España hay un rey que nadie lo elige".

Con igual fin, Castro destacó que en Cuba todos los ciudadanos están armados, y se preguntó por qué no se entregaban las armas en España "a los obreros, a los estudiantes, a los campesinos, a los vascos, a los catalanes y a los gallegos y a todo el que quiere una autonomía".

Consejo de Ministros

Fuentes de Exteriores afirmaron que la llamada para convocar al embajador cubano se produjo en la tarde del jueves, tan pronto como regresó a Madrid el titular de Exteriores, Francisco Fernández Ordóñez, que se encontraba en Namibia. Éste no se entrevistó con el embajador, según Exteriores, porque ayer debía acudir al Consejo de Ministros y, a continuación, partir hacia Lisboa para asistir a la reunión anual ministerial del Consejo de Europa.

Fernández Ordóñez, informa Efe, calificó de "desafortunadas y lamentables" las manifestaciones de Castro, y aseguró que no se iba a hacer ninguna otra gestión, como llamar al embajador español en Cuba, porque sería "desproporcionado".

En Exteriores indicaron que Arias expresó el "profundo malestar, sorpresa y disgusto" causado por las declaraciones de Castro. Estas fuentes restaron trascendencia a esta protesta, que, dijeron, constituye algo relativamente frecuente en el mundo diplomático, y, por otro lado, recordaron que Castro tenía cierta predisposición a realizar declaraciones "fuera de contexto".

Cabe recordar que en febrero del año pasado, Castro comparó a los presos políticos de su país con los etarras detenidos en España.

En diciembre de 1986, Exteriores emitió una protesta formal al embajador cubano a raíz de que Castro tachara de "fascistoide" y "reaccionario" al presidente del Congreso de los Diputados, Félix Pons.

En octubre de 1985, Castro afirmó que se oponía a que el V Centenario se convierta en una apología "de la colonización y la esclavitud".

El embajador cubano afirmó que el incidente había quedado zanjado tras la explicación dada a Inocencio Arias. Según su versión, las palabras de Castro fueron sacadas de contexto, toda vez que se trataba de una comparación del sistema cubano con distintos regímenes democráticos de todo el mundo con fines didácticos para quienes quieren impugnar el modelo político de esta nación.

En ese sentido, según Méndez Morejón, Castro se interrogó sobre quién elige a los monarcas de todo el mundo. Pero el embajador afirmó que Castro nunca quiso atacar la figura del Rey de España.

"Sentimos por don Juan Carlos profundo respeto y admiración, que se ganó con su actitud el 23-F". En el mismo sentido, el embajador explicó que el presidente de Cuba no pretendió hacer un llamamiento a las armas a vascos, catalanes o gallegos, sino que sólo pretendió mostrar el apego de los cubanos hacia su sistema político hasta el punto de que todos están armados. Méndez Morejón calificó de "amistoso y distendido" el diálogo con Arias e indicó que las relaciones entre ambos países son "más que buenas, familiares".

Preguntas al Parlamento

La diputada Loyola de Palacio, del Partido Popular, ha presentado las siguientes cuatro preguntas por vía de urgencia al Gobierno, para ser contestadas en la próxima comisión de Exteriores, que se celebrará el próximo día 27.

El texto de la iniciativa de la parlementaria popular reza así: "¿Cuál ha sido el contenido de la conversación mantenida por el presidente del Gobierno español con el dictador Fidel Castro? ¿Qué explicación puede ofrecer el ministro para justificar el eludir una ceremonia donde estaba presente el general Pinochet y luego invitar en la Embajada de España al comandante Castro? ¿Cuáles han sido las reacciones del Gobierno español a las recientes declaraciones de Castro referentes a las instituciones españolas? y ¿Piensa el Gobierno replantear su política de ayuda económica, amparo diplomático y cordial amistad con la dictadura cubana, a la vista de la sensible evolución de las realidades políticas centroamericanas?".

El presidente Felipe González y el jefe de Estado venezolano, Carlos Andrés Pérez, sugirieron conjuntamente a Fidel Castro que inserte a Cuba en la corriente democrática que recorre Latinoamérica. La propuesta surgió en una entrevista celebrada en Brasilia el pasado día 15, donde los tres dirigentes coincidieron en la toma de posesión del presidente brasileño, Fernando Collor de Melo.