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Caen las barreras

La Liga chilena implanta con carácter experimental los lanzamientos sin oposición de las faltas

Más goles, juego limpio cerca del área y mayor asistencia de público a los estadios fueron los efectos de la aplicación de una nueva regla en el fútbol chileno, los tiros libres sin barrera para las faltas cometidas a 25 metros, como máximo, de la portería. La innovación, puesta en vigor en la Liga, recién comenzada, fue considerada satisfactoria por los dirigentes y los entrenadores, mientras que los árbitros y los periodistas expresaron sus dudas hacia ella.

El cambio chileno, aprobado con carácter experimental y por una temporada por la FIFA, supone que las faltas cometidas en el espacio delimitado por el área y una línea horizontal a 25 metros de la portería son sancionadas con tiros libres sin barreras.Todos sus ejecutantes dispararon desde el semicírculo del área, aunque también podían haberlo hecho desde el sitio exacto en que se produjo la infracción. Así, se convirtieron en penaltis lejanos. Los porteros, que se han resignado a la innovación, están autorizados a moverse y salir al encuentro del lanzador, pero el único que lo hizo fue humillado por un glóbito. "Somos los que más vamos a sufrir. Pero, si es por el bien de nuestro deporte, vale", dijo uno de ellos, Fournier. Sólo uno de los golpes francos fue desperdiciado, pero fue más por la ineptitud del delantero que por la habilidad del guardameta.

"El juego fue mucho más limpio porque las defensas tienen miedo a hacer faltas cerca del área. Estoy contentísimo. No era justo que un delantero, después de eludir a cuatro defensas y ser derribado por el quinto, fuera premiado con un tiro libre ante una barrera compuesta por ocho", manifestó Abel Alonso, el presidente de la federación chilena.

En el encuentro Colo Colo-Universidad, los equipos más populares, disputado ante 80.000 personas en Santiago, los marcajes a los delanteros fueron estrictos en la zona ancha, sobrepoblada, para evitar que llegaran hasta la nueva zona de peligro. El temor de los defensas a cometer faltas originó también un aumento de los goles por las vías habituales.

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