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Las monedas europeas ya sufren el efecto de la unión alemana

La unificación alemana tendrá efectos macroeconómicos sobre toda la CE. A corto plazo, el mercado se ha anticipado de una forma que, a juicio del ministro español de Economía, Carlos Solchaga, "es quizá exagerada", aunque la subida de tipos de interés "ha provocado perturbaciones en el Sistema Monetario Europeo". Solchaga no ocultó la preocupación por un alza que, unida "a la desaceleración de la demanda interna en España, Francia y el Reino Unido, pudiera empujar a una recesión económica no deseable".El Consejo de Ministros de Finanzas de la CE, celebrado ayer en Bruselas, estuvo una vez más centrado en la cuestión alemana. Al margen, los doce aprobaron la reforma de los presupuestos de la CE hasta 1992, que implica elevar de 300 a 500 millones de ECU (unidad de cuenta europea, unos 65.500 millones de pesetas) este año la ayuda comunitaria a los países del Este. En 1991, el apoyo aumentará hasta 820 millones de ECU y, en 1992, a 970 millones.

España se quedó en minoría, apoyada sólo por Portugal, a la hora de defender las tres razones de su rechazo. En primer lugar, según Solchaga, los países mediterráneos, América Latina y Asia quedan subordinados, con sólo 67 millones de ECU más en 1991 y 257 millones en 1992. En segundo lugar, se trata de gastos no obligatorios que pueden condicionar a partir de 1993 el incremento de los fondos estructurales, "necesario para corregir nuestro diferencial de desarrollo". Y, en tercer lugar, vía presupesto, España contribuirá con un 8,08%, mientras que hubiera preferido una cuota voluntaria acorde con la parte de comercio destinada a los países del Este, que en nuestro caso representa un porcentaje muy inferior.

Con respecto a la unificación alemana, plato único de la comida de los ministros, los doce renovaron el respaldo político del proceso, y "la confianza general en la capacidad de las dos Alemanias para culminarlo con éxito". El titular de Finanzas de la RFA, Theo Waigel, insistió ante sus colegas en que el Bundesbank velará para impedir una subida de la inflación. Este año se situará entre el 3% y el 4%, lo cual no es preocupante. Sobre la subida de las tasas de interés, que en la RFA se han disparado tres puntos en los últimos meses, Waigel despreció su efecto sobre las empresas alemanas, que gozan de exceso de liquidez.

Consecuencias para España

Las consecuencias, como reconoció Solchaga, pueden ser más preocupantes para otros países, especialmente los que como España atraviesan una fase de control de la demanda interna y pueden ver llamar a la puerta de su economía "una recesión no deseable". Las monedas europeas han sufrido esas variaciones en las conversiones de cambios y flujos monetarios, si bien la peseta ha resistido el primer embite. El ministro destacó que las intervenciones del Banco de España para sostener el valor del marco frente al dólar procovaron pérdida de divisas por casi 190 millones de dólares en enero, que se recuperaron en febrero.

El Ministerio de Economía ha iniciado un estudio para conocer el impacto macroeconómico de la unificación alemana. "Algo pagaremos todos", admitió Solchaga, quien apuntó la esperanza de las posibilidades que abrirá para todos esa nueva economía ampliada. "Y lo más barato", dijo, "es que la unificación se produzca pronto y bien, porque la alternativa sería el colapso de la RDA".

A pesar del optimismo, las relaciones exteriores de la RDA plantean múltiples problemas, en especial sus vínculos comerciales con la URSS, que incluyen compromisos de compra contrarios a las normas comunitarias. Alemania gozará de ventajas en la futura CE e incluso se puede pensar que, vía RDA, sorteará el control a la venta de tecnología que impone el COCOM.

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