Pedro Sorela y del Corral, diplomático

Ha muerto en Madrid, a los 86 años, Pedro Sorela y del Corral, conde viudo de Nieva, diplomático español, que el 17 de mayo de 1940, en calidad de representante de un país neutral en el conflicto europeo, consiguió un aplazamiento de tres horas en la toma de Bruselas por el Ejército alemán, lo que a la postre significó que no fuese bombardeada. Por ese motivo fue condecorado con la Medalla de Honor de la ciudad de Bruselas, la Encomienda de la Orden de Leopoldo de Bélgica y la Encomienda de la Orden de la Corona de Bélgica.A primeras horas de esa tarde, un obrero bruselense se acercó en bicicleta al Ayuntamiento y allí entregó al burgomaestre Van del Meulebroek, una de las pocas autoridades que aún se encontraban en la capital, un papel escrito a lápiz por los alemanes situados a las puertas de la ciudad. Era un ultimátum exigiendo la entrega inmediata de Bruselas, y la brutalidad de las formas permitía dudar de que el documento fuese auténtico.

Las autoridades belgas solicitaron ayuda al encargado de negocios español, país neutral, y Pedro Sorela, junto con el marqués de Villalobar, se ofreció para acudir al frente. Una vez allí convenció a las tropas alemanas de la necesidad de esperar tres horas, lo que dio tiempo para la evacuación de ciertas tropas británicas que aún se encontraban en la ciudad, y así se evitó el bombardeo.

Sorela permaneció durante casi cuatro décadas agregado a la Embajada de España ante la corte, y ejerció la diplomacia, al igual que su padre, más como un honor que como un trabajo. Estaba también en posesión de las encomiendas de la Orden de Isabel la Católica, del Mérito Civil y del Mérito Agrícola.