Marcha atrás en el BBV por la dispar valoración de la salida del presidente

La distinta interpretación que han efectuado los consejeros procedentes del Banco de Vizcaya y los originarios del Banco de Bilbao del anuncio de dimisión formulado por José Angel Sánchez Asiaín, como presidente del Banco Bilbao Vizcaya, (BBV), ha vuelto a bloquear las negociaciones entre ambos grupos.La oferta de dimisión fue inicialmente bien recibido por los directivos del Vizcaya quienes interpretaron que Sánchez Asiaín había presentado la dimisión sin condición alguna y que su permanencia en el puesto de mando sólo cabía entenderla como un trámite formal hasta la toma de posición de la nueva presidencia. Esta interpretación ha sido muy mal recibida por los directivos del antiguo Bilbao, quienes afirman que la dimisión del presidente está condicionada al alcance previo de un acuerdo.

Esta disparidad de interpretaciones ha vuelto a paralizar las negociaciones que mantenían los representantes de los dos bancos originarios. Ayer no se reunió la comisión negociadora ni tampoco se convocó al consejo de administración ni a la comisión permanente.

Fuentes próximas al antiguo Bilbao han señalado que la interpretación del Vizcaya "retrotrae los hechos a la situación del pasado 14 de diciembre".

Apoyo a Sánchez Asiaín

Por su parte, los consejeros del antiguo del Banco de Bilbao celebraron ayer un almuerzo en el que entregaron una carta al presidente José Ángel Sánchez Asiaín, en la que le expresan su total reconocimiento personal y profesional, se solidarizan con su actuación reciente y asumen plenamente la decisión de presentar una demanda contra la inscripción de los nombramientos de los directivos elegidos por los consejeros del Vizcaya.En la carta, que fue firmada por todos los antiguos consejeros del Bilbao, los directivos expresan su agradecimiento por la ética mostrada en todo el proceso, por haberles mantenido informados en todo momento y por no haberles pedido en ninguna ocasión nada para su interés personal. También manifiestan su disgusto por la interpretación de la dimisión por parte de los directivos del Vizcaya.

Por su parte, los consejeros del Vizcaya insisten en que la aceptación de la dimisión abriría una nueva vía para solucionar definitivamente el conflicto. En su opinión, los hombres del Bilbao deberían elegir al sustituto de Sánchez Asiaín que gozaría de la confianza de todo el consejo, a condición de que éste la otorgara también a Alfredo Sáenz, el copresidente elegido por el Vizcaya. Estos consejeros consideran que sobre la base de una mutua. confianza deben designarse a los máximos representantes del banco en base a criterios de "gobernabilidad, unidad de mando y decisión, coherencia interna y estabilidad".