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Dinero para la elite

J.-J. F., El presupuesto del deporte en 1989 fue de 403,7 millones de marcos, más de 25.000 millones de pesetas al cambio oficial. Como índice significativo, y también con datos oficiales, mientras a las escuelas de deporte para niños se dedicaron 41,3, a los centros de alto de rendimiento 82,8, casi tanto como a las federaciones, a las que se destinó 81. En la RDA existen actualmente 31 federaciones.

La propia DTSB se reservó la mayor partida, teórica mente para organizaciones provinciales y municipales, 150,6 millones, muy poco en la comparación de tres centenares de atletas de alto rendimiento frente a tres millones de practicantes.

El secretariado de la DTSB, que en parte ha acabado tomando el poder ante la desintegración de la cúpula a mediados de diciembre, nunca tuvo, por ejemplo, acceso a las finanzas. Eran los representantes que ahora se considera no manchados por el exagerado culto anterior a la elite y a sus lujos. Es decir, los limpios, con lo discutible que ello puede ser en tiempos de cambios. El que antes callaba y otorgaba, ahora es el más progresista con un hábil cambio de chaqueta.

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Por otro lado, mientras un fiscal estudia aún las circunstancias del suicidio del tesorero Franz Rydz por si hubiera más implicados, la DTSB trata ya de buscar patrocinadores al estilo occidental, pero sin profesionalizar del todo el deporte en el país. Ello supondría una claudicación demasiado rápida, por ejemplo, ante la RFA. Como en política, el trasvase, o incluso la unión, se empiezan a admitir, pero no la invasión y absorción. Al menos, todavía.

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