Molina sustituye a García Tizón al frente del PP en Castilla-La Mancha

José Manuel Molina, alcalde de Toledo, resultó ayer elegido presidente del Partido Popular en Castilla-La Mancha, con lo que su antecesor, Arturo García Tizón ha quedado totalmente descabalgado de la estructura de dirección del partido y con él los últimos vestigios de poder del anterior dirigente nacional del PP, Antonio Herrández Mancha.Molina resultó elegido sin oposición y con las bendiciones del próximo presidente del partido, José Marua Aznar, que asistió a la clausura del Congreso.

La dimisión de García Tizón como presidente del PP en Ia región, sugerida varias veces por los hombres de Aznar, dejó vía libre a Molina para controlar el aparato en las cinco provincias castellano-manchegas.

Sin sorpresa

La caída del ex secretario general del Partido Popular impedía que éste pudiera asistir como miembro nato al congreso celebrado ayer. Asimismo, su hombre de confianza, el presidente de la Diputación Provincial de Toledo, Mariano Díez, tampoco apareció por el congreso pese a ser compromisario.La candidatura de José Manuel Molina, única presentada, obtuvo el respaldo de 583 compromisarios, 48 votaron en blanco y 13 papeletas fueron declaradas nulas. La identificación de la práctica totalidad de los dirigentes provinciales con José Manuel Molina no dejó opción alguna a la sorpresa.

José María Aznar, por otra parte, alabó la iniciativa de las Cortes de Castilla-La Mancha de aprobar una ley que evite el transfuguismo, aunque aprovechó la ocasión para señalar su interés en que "los socialistas apoyasen también iniciativas de este tipo en otras comunidades autónomas, como por ejemplo en La Rioja", en clara alusión a la crisis por la que atraviesa el Ejecutivo autonómo de aquella región, tras la salida del Partido Riojano Progresista de la coalición que manenía con el Partido Popular y el Centro Democrático y Social.

El líder del PP indicó que las mayorías absolutas no son buenas ni malas, "eso depende de la utilización que el partido más votado haga de esa mayoría".

"Nunca he dicho que no me gusten las mayorías absolutas", añadió, "al revés, ya que proporcionan tranquilidad, pero entendemos que hay que gobernar desde el diálogo y la tolerancia, y así va a gobernar el Partido Popular en Galicia".

José María Aznar dijo congratularse por el diálogo emprendido por el presidente del Gobierno, Felipe González, con los representantes de las centrales sindicales UGT y CC OO, y de la patronal española.

"Creemos que con nuestra iniciativa de acercarnos a los sindicatos y a los empresarios algo hemos podido contribuir a este nuevo clima de entendimiento", dijo José María Aznar a modo de recordatorio de que él mismo y otros compañeros de su partido se habían entrevistado antes que Felipe Gonzalez con los llamados interloculores sociales.