El Joventut venció al Madrid en un extraño partido
El Joventut resolvió un extraño partido después de 40 desconcertantes minutos de un baloncesto poco habitual entre los llamados equipos grandes. Sólo la emoción de un final apretado salvé en parte el espectáculo, pero que nadie se engañe porque ni tan siquiera lo apretado del marcador fue suficiente para calificar de bueno lo visto en Badalona.Difícil de entender y más de explicar fue el primer período. Los dos equipos se enfrascaron en un juego de despropósitos propiciadas por la pareja arbitral. Continuas interrupciones motivaron un marcador bajo (2020). El resultado siempre se movió en mínimas diferencias.
Los promedios de tiro en este período fueron ínfimos, por debajo del 50% en ambos equipos. La Penya anotó uno de 10 triples y el Real Madrid 3 de 10 tiros libres. Sólo Antonio Martín, el rebote defensivo de su equipo y los jugadores exteriores del Joventut pusieron gotas de Calidad.
Muchas faltas
El segundo tiempo empezó también con fallos: pocas canastas y muchas faltas. Algunos cambios estratégicos en los sistemas defensivos de ambos equipos sólo ayudaron a aumentar el número de errores. Frederick estuvo resolutivo en esta parte del encuentro y puso los puntos de su equipo. Los cambios eran incesantes en la busca de la mejor solución: tres altos o tres exteriores. Es posible que ambos entrenadores, tras los 30 cambios que realizaron, no se mostraran seguros de haber dado con la solución.
La desequilibrada actuación de la pareja arbitral fue tan grotesca que no señaló ninguna falta personal al Real Madrid en los primeros cinco minutos y luego tres consecutivas a Biriukov en tres minutos. También permitir que el Madrid tuviera en pista seis jugadores durante unos breves segundos, lo que no fue castigado con la reglamentaria técnica, sino con la repetición de la jugada cuando los blancos ya habían perdido el balón.
A final Villacampa tuvo en su poder la decisión y la aprovechó. Obligó a Romay a cometer sus dos últimas faltas y luego eliminó también a Martín. Aprovechó la técnica del pivot blanco para anotar los dos tiros libres y el balón al saque de banda. Estos cuatro puntos colocaron el marcador 73-69 a menos de un minuto. Luego, un tiro libre de Montero y un dos canastas de Frederick y Johnson cerraron el tanteo.
