Españoles en la 'cena de Trafalgar'

Hasta ahora, y dada la situación especial de España en el seno de la OTAN, que permanece al margen de la estructura militar de mando, la participación de nuestro país en maniobras navales aliadas había sido solamente parcial, para prestar sucolaboración desde tierra o con avionea barcos y submarinos, pero siempre con intervención parcial aislada en tales maniobras. De ahí que la presencia de la corbeta Descubierta en los ejercicios Deterrent Force 2 / 89 sea una novedad que fuentes aliadas destacan con satisfacción, simpatía y esperanza.Otras novedades de estos ejercicios navales mediterráneos -que se realizan dos veces al año con barcos de los países del sur de Europa, junto con la participación de Estados Unidos y Reino Unido- las constituyen la presencia de un buque de la República Federal de Alernania, enviado "para mostrar su solidaridad al resto de los aliados", y el regreso de Grecia a este tipo de maniobras después de cinco años de represalias a la OTAN, actitud derivada del contencioso greco-turco. La armonía y distensión que presiden este tipo de operaciones entre los aliados permitió que el comandante de la fragata griega HS Elli acudiera una recepción de su homólogo turco a bordo del destructor Kilikalipasa.

Historia también tuvieron oportunidad de hacer el comandante de la Descubierta, el capitán de corbeta Enrique Ros de la Huerta, y su segundo comandante, el capitán de corbeta Enrique Guitart, cuando asistieron el pasado 20 de octubre, durante la escala de la flota aliada en Augusta (Sicilia), a la cena de la noche de Trafalgar, ofrecida por el comandante británico E. M. Hackett a bordo de la fragata Coventry, velada que constituye una solemne tradición anual en la Marina real británica.

La invitación a la cena incluía un lujosísimo menú impreso junto a un facsímil de la edición de The Times del martes 7 de noviembre de 1805, donde se informaba de la muerte del almirant Nelson y del victorioso, desarrollo de la batalla naval de Trafalgar frente a las naves españolas y francesas.

Entre consorré Colbert, filets de sole Pilvard,filets de boeuf Wellington, vaisseau de guerre y roulades au fromage, regados con cinco selectos aperitivos, vinos y licores, los marinos británicos,y españoles celebraron como aliados, entre bromas y anécdotas históricas, una velada probablemente impensable hasta hace poco.

Anécdotas al margen, los marinos españoles tuvieron oportunidad de conocer de cerca los supermodernos equipos técnicos de la fragata Coventry, botada en junio de 1988, una de Ias unida des más avanzadas de la profesionalizada Royal Navy.