Evacuada la delegación diplomática española en La Haya tras la explosión de dos bombas

El estallido de dos bombas causó anoche serios destrozos en la Oficina Comercial de la Embajada española en La Haya y en la Oficina Laboral. Una mujer que en aquel momento pasaba frente a ésta última resultó levemente herida. Todo el personal de la representación española fue evacuado de sus domicilios. A las dos de la madrugada nadie había reivindicado todavía el atentado. El miércoles pasado una bomba destrozó el coche del cónsul español en Rotterdam.

El embajador de España en La Haya, Manuel Sassot, declaró a primera hora de la madrugada a EL PAÍS que todo el personal de la delegación diplomática española en los Países Bajos había sido evacuado de sus domicilios y trasladado a la Comisaría Central de la Policía de La Haya.Sassot fue autorizado a entrar en la sede de la Embajada durante unos minutos para hacer las primeras llamadas telefónicas y las gestiones oportunas. El embajador de España, nervioso y afectado por el doble atentado, dijo no encontrar explicación alguna a los ataques. "Todos han sido evacuados y yo sólo puedo estar aquí unos minutos. Adiós", concluyó Sassot.

Segunda detonación

La primera explosión tuvo lugar a las 22.45, poco después de que un desconocido lanzara un objeto contundente contra las ventanas del edificio de la Oficina Comercial, arrojando a continuación la bomba.Los bomberos de La Haya apenas habían extinguido este fuego cuando se produjo el segundo estallido. Los artificieros de la policía que acudieron a la Oficina Laboral de la representación diplomática española tras la explosión hallaron además un paquete sospechoso que iba a ser explosionado al cierre de esta edición. La policía evacuó la zona.

La Embajada española en la capital holandesa se encuentra en la zona diplomática. Las oficinas contra las que se ha atentado, por el contrario, se encuentran integradas en barrios de viviendas comunes, en una zona céntrica de La Haya.

"Estaba en la cocina cuando oí un ruido enorme. La explosión fue tan fuerte que pensé que era aquí mismo", declaró a la agencia de noticias Reuter Frits Reuhl, propietario del Hotel Cattenburg, cercano al lugar de los hechos.

El pasado miércoles, otra bomba destrozó el coche de Javier Gil-Catalina, cónsul general de España en Rotterdam, que reside asimismo en La Haya. En aquel atentado, que tampoco ha sido reivindicado, la onda expansiva afectó a 15 edificios cercanos y la policía pensó que podía deberse a una confusión; en la misma calle Delistraat vive el consejero de la Embajada de Francia, y no lejos un diplomático mexicano.

El cónsul español en Rotterdam. se encuentra en este destino desde hace tan solo dos meses, procedente de la Embajada española en Turquía. Gil-Catalina había declarado que nunca ha sido objeto de amenazas. Es también la primera vez que la misión diplomática española en Holanda es objeto de atentado.

Protección

El embajador Manuel Sassot había solicitado el jueves a las autoridades holandesas que dieran protección a los diplomáticos españoles destinados en los Países Bajos. Fuentes de la policía no se explicaban anoche el motivo de estos atentados, e intentaban establecer una relación entre las tres explosiones."Estamos investigamos, pero no hay ningún indicio que nos permita encontrar explicación a esto", dijeron las fuentes policiales consultadas.

Fuentes diplomáticas relataron a Efe que en la Embajada de Madrid en La Haya se había recibido hace unos días una amenaza de bomba contra la residencia del embajador, Manuel Sassot, quien se puso en contacto inmediatamente con las autoridades holandesas. Las mismas fuentes añadieron que el ministro español de Asuntos Exteriores, Francisco Fernández Ordóñez, se comunicó telefónicamente entonces con el embajador español.