Nicolás Redondo se distancia aún más del PSOE en el último día de la campaña electoral

Nicolás Redondo, secretario general del sindicato socialista Unión General de Trabajadores (UGT), hizo unas declaraciones ayer en las que evidenciaba un nuevo distanciamiento respecto del PSOE, precisamente pocas horas antes de que se cerrase la campaña electoral. Los periodistas le preguntaron: "¿Existe alguna candidatura que haya reflejado las reivindicaciones de la Propuesta Sindical Prioritaria?" (la denominada PSP, que recoge las reivindicaciones de las centrales). El dirigente de UGT contestó escuetamente: "Sí". "¿Cuál?", le insistieron. Y él zanjó: "Ustedes lo saben mejor que yo".

Redondo compareció ayer en el acto de clausura de la conferencia mundial de la FIET, Federación Internacional de Empleados, Técnicos y Profesionales, que se desarrolló en Madrid, informa Martha Zein. El histórico sindicalista -que respaldó hace 15 años la elección de Felipe González como secretario general del PSOE en el congreso de Suresnes (Francia)- no cedió un ápice en su postura de no mostrar apoyo alguno al partido socialista. Insistió en que su sindicato no respalda ninguna opción, pero precisé: "A UGT y a los trabajadores no les puede desagradar que existan partidos políticos que asuman las reivindicaciones del 14 de diciembre", fecha de la huelga general convocada por esta central y Comisiones Obreras (CC OO). -Nicolás Redondo dijo también: "Nosotros nunca hemos pretendido cambiar radicalmente el voto en un sentido o en otro". El secretario general de UGT explicó luego que la decisión del comité confederal de no apoyar a ningún partido político en estas elecciones no responde a "una intención partidista". Para Redondo, los protagonistas son ahora los partidos políticos. "Creo que cualquier organización sindical que apoye de manera intransigente a una opción política puede sufrir un cierto rechazo de la sociedad". Por eso, agregó, "lo mejor que hemos podido hacer" es no pedir el voto para ningún partido.

Con respecto a la aparición de banderas de UGT en el vídeo electoral de Izquierda Unida, insistió en que la Unión General de Trabajadores "tiene la voluntad de defender su autonomía frente a cualquier partido político, a pesar del precio que le está costando a UGT de descalificaciones, falsos rumores, mentiras...".

Redondo aseveró también: "Si con la mitad del esfuerzo que se hace ahora para recabar el voto de la UGT se hubieran asumido las reivindicaciones del 14 de diciembre, ahora no estaríamos en esta situación". A pesar de ello, y de "tener claro" su propio voto, considera que a lo largo de la campaña "no ha habido un debate serio sobre las necesidades sociales de este país".

Nicolás Redondo se extendió también en consideraciones sobre la mayoría absoluta que, según los sondeos, tiene el PSOE al alcance de la mano. A juicio del líder sindical, una mayoría absoluta o relativa del partido socialista no debería dificultar la concertación social; y aseguró que no afectará a la dirección de su sindicato.

Según Nicolás Redondo, la mayoría absoluta no se debería entender como una derrota, "no existe, como se está intentando hacer entender, una relación entre el movimiento sindical y un resultado electoral".

Independientemente del resultado, el secretario general de UGT espera "que el Gobierno que salga de las urnas tenga una mayor madurez, mayor sensibilidad social y se siente a negociar de manera seria las propuestas moderadas que está haciendo el conjunto del movimiento sindical".

Camacho

El presidente de Comisiones Obreras, Marcelino Camacho, se había referido también a la mayoría absoluta el día anterior. Camacho declaró en la presentación del libro Hay otro socialismo, conversaciones con Marcelino Camacho, que la mayoría absoluta del PSOE en la próxima legislatura "convalidaría la política económica que hasta ahora se ha seguido". Los dirigentes socialistas, agregó, "enterrarían por los siglos de los siglos el 14 de diciembre, esa sinfonía inacabada, y no os quiero hablar de lo que pasaría con la Propuesta Sindical Prioritaria. Y comprendo perfectamente la resolución nuestra, que la he votado, pero también se cargarían la dirección de UGT, si no en el próximo congreso en cuanto pudieran, irían detrás de ella".

Camacho hizo un paralelismo entre el actual proceso electoral y los meses previos a la guerra civil en 1936. "Entonces UGT tomó posición: dijeron que había que votar todos al Frente Popular, con el apoyo de CNT".