Artesanos

A mí me admiran algunos intelectuales de este país, que con la misma soltura pontifican sobre el punto G, el teorema de Gödel o sobre asuntos vecinales. En este caso me refiero al señor J. V. Marqués y su artículo acerca de los artesanos.El tema de la venta ambulante es un gran problema que afecta a las ciudades, y que, en el caso de Madrid, los sucesivos Ayuntamientos socialistas lo único que han hecho es dejarlo pudrir a costa de que un buen número de vecinos se vean privados de los más elementales derechos humanos.

Señor Marqués, usted no sabe lo que es escuchar la misma canción de Perales desde las nueve de la mañana hasta las tres de la tarde de cualquier día festivo durante cuatro años seguidos, o ahora la lambada. Usted no sabe lo que es que llegue un festivo y tener conciencia de que a lo largo de seis o más horas no se puede salir de casa, rogando además que no se presente una emergencia. Usted no sabe lo que es esperar durante años a que el señor Barranco nos concediera una entrevista para que nos diera solución a estos problemas, y que nos contestara textualmente que nos compráramos la casa en otro barrio.

Respecto a sus artesanos, según mis noticias, el Mercado Puerta de Toledo iba a ser su destino, pero la faraónica obra -que según EL PAÍS nos costó 3.000 millones de pesetas- no debió ser lugar digno para ellos, o al revés, eso nunca se sabrá. Nos hicieron un mercado de elite, mercado que me temo necesite nuevos millones para su reconversión, puesto que el barrio donde se ubica, el Rastro, no es lo que más necesitaba.

Yo no sé si el PSOE, en ese millón de nuevos puestos de trabajo que va a crear, contabilizará los de los vendedores ambulantes, contra los que nada tengo, pero si es así, sería importante que tuviera en cuenta los derechos de los vecinos y las leyes que ellos mismos hacen.

Y a usted, señor Marqués, tan defensor de las minorías oprimidas, cosa que aplaudo, ahora conocedor de la existencia de grupos de vecinos que soportan una falta de libertades digna de algunas dictaduras, ruego nos tenga presente en sus oraciones.-

Begoña Aína.