Suarez dice que Leguina ofreció al CDS la presidencia de Madrid para evitar la moción en el Ayuntamiento

El presidente del CDS, Adolfo Suárez, afirmó ayer en Santa Cruz de Tenerife: "Joaquín Leguina nos ofreció al día siguiente de las elecciones europeas la presidencia de la Comunidad autónoma de Madrid a cambio de la retirada de la moción de censura del Ayuntamiento de la capital". La moderación de Suárez volvió a romperse en Canarias, uno de los principales puntales políticos del del CDS. Suárez dijo que sobre Leguina se le ocurrían "cosas tremendas, "pero no voy a decirlas porque no es el tono de mi campaña".

Por su parte, Agapito Ramos consejero de Presidencia en el Gobierno regional que preside Joaquín Leguina, rechazó ayer " por absurdas" las declaraciones de Suárez y añadió: "Muy mal tiene que estar Suárez cuando recurre a este tipo de historias, dichas por un señor como Fernando Castedo, que mucho hablar de Madrid pero que en cuanto ha podido ha abandonado la comunidad".Suárez aseguró ayer en Tenerife que Canarias ha sido una comunidad "que siempre me ha respondido en los momentos difíciles". El CDS logró consolidarse en Canarias bajo la presidencia de Lorenzo Olarte.

Sobre las encuestas publicadas ayer, Suárez hizo una descalificación general: "Son muestras muy pequeñas para hacer una extrapolación a todas las provincias". El CDS sigue prefiriendo la encuesta del CIS. El CDS "no bajará del 12% de los votos", dijo. Suárez considera que es "una posibilidad" el pronóstico del secretario general, José Ramón Caso, según el cual obtendrían entre 35 y 40 escaños.

Su audacia no tiene límites. El sábado, el aeropuerto de Santander se cerró por el intenso viento, pero Suárez despegó en su avión privado y llegó a tiempo al mitin de Badajoz.

En la plaza de toros de Santa Cruz de Tenerife, -algo más de media entrada- dio la vuelta al ruedo, estuvo risueño y saludó a sus "paisanos de Garachico", que le declararon hijo adoptivo. Suárez entusiasmó. Lástima que los "paisanos de Garachico", bajo un sol abrasador, ondearan pancartas y banderas del CDS en la anterior campaña y con el lema anterior: Paso al centro.

Mientras, el candidato a la presidencia del Gobierno por el Partido Popular (PP), José Maria Aznar, se expresó anoche en Barcelona como si fuera a ganar las elecciones. Aznar aseguró que en el gobierno que tiene "hecho" hay mujeres. En un tono ilusionante para persuadir a su público de que España podía funcionar mejor, Aznar resaltó que "Cataluña no merece que nadie la quiera hacer pequeña porque no es sólo de unos, sino de todos los catalanes, de los que hablan catalán y de los que hablan en castellano", según informa Juan G. Ibáñez.

Interesado en captar la atención del electorado catalán "centrado, tolerante, que busca el entendimiento y practica la negociación", reprochó a Miquel Roca el utilizar un doble lenguaje, con el que dice cosas diferentes en Madrid y Barcelona y le exigió que se defina a favor del socialismo o con la alternativa al PSOE.

Para demostrar que los socialistas "no es que sean malos, sino que son incompetentes", aludió a que el Gobierno ha convocado para antes de las elecciones una cumbre contra la droga cuando, en su opinión, han sido los socialistas los que con una reforma irresponsable del Código Penal han estimulado el tráfico de estupefacientes.

Ofensiva rinal

Por su parte, el candidato de Izquierda Unida (IU) a la presidencia del Gobierno, Julio Anguita, inició ayer en su califato de Córdoba la ofensiva final de su campaña electoral, que él mismo ha bautizado como batalla de Andalucía, pidiendo de nuevo el voto a los militantes del PSOE y a los trabajadores afiliados al sindicato socialista UGT, informa Luis Mauri.

Anguita aseguró ayer, ante unas 5.000 personas que abarrotaban el teatro al aire libre de Córdoba, que la pugna entre los modelos de sociedad que defienden IU y el PSOE se decidirá en Andalucía.

El máximo dirigente de IU, que se mostró "moderadamente satisfecho", tras conocer los resultados de las encuestas electorales publicadas ayer, ya había destapado la caja de sorpresas de su campaña el pasado sábado en Valencia, en un mitin al que asistieron más de 10.000 personas, al pedir directa el voto para IU a los militantes del PSOE y a los trabajadores de UGT. La propuesta de sedición formulada por Anguita es clara: "El programa de IU es auténticamente socialista; los antisocialistas son los dirigentes del PSOE".

Este cambio introducido por Anguita en su estrategia electoral, que ha imprimido un carácter más directo y beligerante a su discurso, marca el inicio de la ofensiva final del candidato de IU, que desde ayer y hasta el cierre de campaña centrará sus esfuerzos en Andalucía, comunidad en la que Anguita, a pesar de reconocer la primacía abrumadora del PSOE, sostiene que IU puede arrancar a los socialistas un buen pedazo de la tarta electoral.

Anguita fustigó ayer a los abstencionistas e hizo un llamamiento: "Nos hacen falta votos, vengan de donde vengan. El combate es total; necesitamos todos los esfuerzos".