Magüi Mira
El desdoblamiento de una actriz
La actriz Magüi Mira, que irrumpió con éxito en la escena española hace una década con su interpretación de La noche de Molly Bloom, adaptación teatral del último capítulo del Ulises, de James Joyce, atraviesa una etapa de desdoblamientos múltiples que en su jornada de ayer llegaron al despropósito. El pasado jueves estrenó, como protagonista, la puesta en escena de Emilio Hernández de Maribel y la extraña familia, de Miguel Mihura, por lo que anoche no podía faltar a su cita con los espectadores. Pero justo a unos metros del teatro, en la acera de enfrente, también estrenaba como protagonista -junto con Charo López- la película de Carles Mira El rey del mambo. Magüi no se lo pensó dos veces. A las nueve se vistió de gala, y una hora después acudía al cine Carlos III a ejercer ante la Prensa y los curiosos. Este trabajo sólo le llevó unos minutos, ya que por la puerta trasera abandonó la sala y a toda prisa se fue al teatro, se cambió nuevamente de ropa y salió al escenario. Tras recoger los entusiastas aplausos finales, de nuevo la carrera a camerinos, de nuevo traje de gala, y a toda prisa se marchó a la fiesta que con motivo del estreno de la película se celebraba.Pero ahí no queda todo. Mientras que en el cine hace de Ana, una mujer sobria que por su propia valía e inteligencia ha triunfado en el mundo de la ingeniería nuclear, en el teatro hace de Maribel, personaje ingenuo e inculto que Magüi define como "una entrañable y maravillosa puta". Sobre ello comenta la actriz: "Es impresionante verte a la vez en dos mujeres tan distintas, además de yo misma; te da un tiemble distinto y es como una esquizofrenia múltiple".
Pero aún hay más. En la película la dirige su hermano, y en el teatro la dirige su pareja en la vida privada. Del primer aspecto la actriz comenta "¡ya era hora'", seguramente porque su hermano es la primera vez que la llama, a pesar de las siete películas que ha realizado. En cuanto a lo segundo, el director Emilio Hernández la llamó hace años para trabajar en una adaptación del texto de Schiller María Estuardo, y se convirtieron en un sólido tándem profesional que posteriormente fue privado.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.