Hijos e hijos
En relación a la columna Hijos, del señor Ignacio Carrión, publicada en su periódico con fecha 27 de septiembre de 1989, habría que decirle al señor Carrión que lo de levantarse a las dos de la tarde lo harán sus hijos (supongo que no trabajan); lo de ir de copas no se hace todos los días, porque vale un pastón; lo de dejar el coche sin gasolina será porque su padre llenará el depósito esa misma tarde, y en mi habitación concretamente no hay un poster, sino una lista, que dice:- Ir a trabajar, de nueve a dos y de cuatro a siete; hacer la compra a las 7.30; ir a clase a las 8.30, y a las diez, planchar la ropa del día siguiente. Lo que quiero decirles es que no todos disfrutamos la suerte del hijo del señor Carrión.- .
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