La policía busca desde hace nueve meses a un joven que ha violado a 20 mujeres junto a la Casa de Campo

La policía madrileña busca desde hace nueve meses a un joven del que sospecha que durante este tiempo violó o sometió a tocamientos y abusos deshonestos a 20 mujeres que caminaban solas por los alrededores de la Casa de Campo y los barrios de la Puerta del Ángel, El Batán y Aluche. Entre las víctimas sexuales del sátiro están al menos dos estudiantes norteamericanas que estaban alojadas temporalmente en el albergue juvenil Richard Schirrmann, dependiente de la Comunidad de Madrid. El último ataque imputable al maniaco se produjo hace aproximadamente 10 días en la avenida de Portugal.

Aparenta 25 años. Mide aproximadamente 1,60 metros de estatura. Complexión normal. Tiene el cabello corto, ondulado y de color negro. Lo que más destaca en su cara es su nariz chata y terminada "en porra", según relata la mayoría de sus víctimas. La policía se halla desde comienzos de año tras la pista ole un individuo con estas características, al que se le achacan alrededor de 20 agresiones sexuales.Los agentes de la comisaría del distrito de Los Cármenes y de la Brigada Provincial de Policía Judicial, encargados del caso, han realizado un retrato-robot basado en los datos facilitados por las mujeres. Pero las investigaciones han resultado hasta ahora infructuosas y "no existe la menor pista" sobre dicho individuo.

La carrera delictiva del maníaco comenzó el pasado mes de enero, intensificándose durante los de abril y mayo, según informaron fuentes policiales. No actúa ni en unos días determinados ni en unas horas fijas. La único que hay común entre los 20 casos que se le imputan es que los perpetró en los alrededores de la Casa de Campo y en barrios próximos.

Entre las víctimas hay al menos dos estudiantes norteamericanas que estaban de paso por Madrid. Kelly Anil F., de 22 años, fue violada sobre las nueve de la noche del pasado 5 de marzo, después de salir del metro de Lago para dirigirse al albergue juvenil Richard Schirrmann.

Cazadora negra

Cuando Kelly caminaba por el paseo de Los Castaños, según su declaración, fue abordada por un hombre de unos 25 aflos, 1,60 de estatura y vestido con una cazadora negra de cuero. Tras sufrir la violación, la joven fue atendida en el destacamento de la Policía Municipal ubicado frente al albergue, desde donde fue llevada al hospital Clínico de San Carlos.La segunda estadounidense fue violada hace aproximadamente 10 días, cuando andabpor la avenida de Portugal en dirección al mencionado albergue, dependiente de la Consejería de Educación de la comunidad autónoma. Este caso es el último que se atribuye al sátiro, aunque la policía no lo tiene plenamente confirmado debido a que la víctima no ha podido testificar en profundidad por haber regresado ya a su país.

Ricardo Rodríguez Contreras, director general de Juventud del Gobierno regional, reconoció ayer que desde hace un año y medio se han registrado bastantes casos de robos y agresiones de todo tipo contra jóvenes alojados en el centro Richard Schirrmann, que tiene capacidad para 130 personas.

El mayor problema del albergue es que está ubicado a más de un kilómetro de distancia del metro de Lago y de la última parada del autobús de la línea 33. Por tal motivo, los jóvenes deben recorrer esta distancia en medio de la oscuridad. "Confiamos en queese tramo disponga de alumbrado durante este mismo aflo, tras las gestiones realizadas ante la Junta Municipal de Moncloa" manifestó el director general de Juventud.

Prolongar el autobús

La comunidad autónoma ha pe dido también al Consorcio Regional de Transportes que prolongue la línea del autobús hasta el albergue. Pero tal solicitud parece que no será atendida, debido a su alto coste. Mientras tanto, los responsables del albergue han inventado una solución que consiste en citair a los chicos a una determinada hora de la no che en la estación de Lago u otro lugar, en donde son recogidos con un coche particular.La policía tiene la sospecha de que el buscado violador es el autor de ocho violaciones y doce agresiones que no llegó a consu mar por diversos motivos. Entre las víctimas hay varias que fueron abordadas cuando se dirigían a sus domicilios, enclavados en el distrito policial de Los Cármenes.

El maníaco sorprende a las mujeres, generalmente por la espalda, y posteriormente las conduce a algún descampado bajo constantes amenazas de muerte. Sin embargo, en ningún momento esgrime ni una navaja ni una pistola, según las declaraciones de las denunciantes.

Fuentes policiales barajan la posibilidad de que el agresor sea uno de los miles de jóvenes que actualmente están haciendo la mili en los cuarteles del barrio de Campamento. Tal hipótesis está basada en la forma en que el delincuente lleva cortado el cabello.

Los responsables de la investigación se han negado a facilitar el retrato-robot, al estimar que éste es poco fiable. "Creemos que no hay suficientes datos", dijeron, "para confeccionar un dibujo que pueda servir para reconocer al violador".