_
_
_
_

El mercado en discordia

Los comerciantes del Puerta de Toledo acusan a la Comunidad de haber abandonado el proyecto de convertir el centro en el foco cultural del sur

Jorge A. Rodríguez

Diez meses después de la inauguración a bombo y platillo del Mercado Puerta de Toledo como "un foco para reactivar una de las zonas más castigadas de la ciudad", los comerciantes se quejan de que la Administración les ha olvidado. "Y no sólo de aquellos proyectos de convertirlo en un faro cultural en el Rastro. No tenemos licencia de apertura. El centro no se promociona y perdemos dinero", dicen. Los responsables del mercado restan importancia a estas acusaciones y aseguran que el asunto responde a las disputas políticas entre el Ayuntamiento y la Comunidad.

El Instituto Madrileño de Desarrollo (Imade) tenía claro lo que había que hacer con el mercado de pescados: convertir sus 25.000 metros cuadrados en un comercio de elite a los pies del Rastro. Ciento cincuenta diseñadores, anticuarios, joyeros y artesanos de primera fila aceptaron el reto de equilibrar culturalmente el sur de Madrid.Casi un año después, los comerciantes creen que el faro de cultura se ha quedado en linterna. De hecho, los problemas empezaron pronto. Los presupuestos casi se duplicaron y las obras se retrasaron. Se pensaba abrir en 1987, pero finalmente se abrió en noviembre de 1988 con las obras sin terminar y comerciantes sin instalar.

El principal problema del mercado es el escaso público. A pesar de que la empresa asegura que por el centro pasan semanalmente unas 18.000 personas, los comerciantes consideran que el comprador de clase alta de los productos del mercado no termina de llegar. Se mira mucho y se compra poco.

Así las cosas, la Asociación de Comerciantes del Mercado y la Empresa Pública Mercado Puerta de Toledo -empresa que gestiona el centro- se han lanzado a una carrera de acusaciones cruzadas.

"Nos han vendido una moto. Que si foco cultural, exposiciones para atraer público, centro fundamental en el Madrid de 1992. De eso se han olvidado", dice Guillermo Marco, secretario general de la asociación. José Ángel Serrano, gerente de la empresa pública, contesta con una frase: "Esto es un centro comercial, no cultural". Pero apostilla que la promoción del mercado sigue.

Además, los comerciantes creen que la empresa les ha sisado 30 millones de los 130 destinados para publicidad en 1988 y quieren que el dinero de la Administración siga llegando. José Ángel Serrano contesta que los comerciantes no quieren invertir dinero en promoción y asegura que este año la empresa va a gastar 40 millones en publicidad. "Pero nosotros ya hemos aprobado un presupuesto de 44 millones", afirma Marian Diéguez, presidenta de los comerciantes.

Sin licencia

El último episodio de la batalla. El edificio no tiene licencia escrita de apertura, lo que impide que los comerciantes puedan obtener la suya particular en la Junta de Distrito de Centro"La licencia la solicitamos el 31 de agosto de 1988 y ha sido concedida por silencio administrativo positivo, tal y como estipula el real decreto de marzo de 1986. Si no la tenemos escrita es culpa de la Gerencia de Urbanismo", dice Serrano, quien cree que el asunto de las licencias se ha convertido en un arma arrojadiza en las disputas entre el Ayuntamiento y la Comunidad de Madrid.

En el mercado, los números cantan. La empresa pública Mercado Puerta de Toledo perdió en 1988 69.262.269 pesetas, y hasta junio de 1989 ha perdido 167.388.649 pesetas, según sus propios datos. Pero Carmen ALvarez-Arenas, diputada regional del Partido Popular, asegura que el mercado perdió más de 235 millones en 1988 y que las previstas para este año son de 152 millones. Todo sin contar las pérdidas de los vendedores.

Serrano dice que estas pérdidas vienen derivadas del incremento en los presupuestos de rehabilitación, que duplica la cantidad anual a amortizar. "Además, la empresa sólo ingresa al año 260 millones por alquiler de locales". Serrano afirma que hay una fórmula para que el mercado funcione sin pérdidas: "El Imade [organismo de la Comunidad] podría hacerse cargo del,pago del crédito, de 1.500 millones contraído con la Caja de Madrid".

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Sobre la firma

Jorge A. Rodríguez
Redactor jefe digital en España y profesor de la Escuela de Periodismo UAM-EL PAÍS. Debutó en el Diario Sur de Málaga, siguió en RNE, pasó a la agencia OTR Press (Grupo Z) y llegó a EL PAÍS. Ha cubierto íntegros casos como el 11-M, el final de ETA, Arny, el naufragio del 'Prestige', los disturbios del Ejido... y muchos crímenes (jorgear@elpais.es)

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_