Los directivos han conseguido el visto bueno de las autoridades

Las intensas gestiones desplegadas por los directivos de ambas cajas han logrado la bendición de todas las autoridades que intervienen en la operación. Fuentes del Banco de España han marlifestado que su apoyo a la operación cabe situarlo en el marco de la política genérica de las autoridades monetarias, favorable a las; fusiones del bancos y cajas, especialmente en el caso de estas últimas por tratarse de un sector muy atomizado.Aunque el Banco de España no debe autorizar la fusión de una forma expresa, su opinión tiene un peso muy relevante para la decisión que después adopte formalmente el Ministerio de Economía y Hacienda, que es el organisino que debe aprobar la concesión de exenciones fiscales.

El criterio básico del Ministerio de Economía para conceder las exenciones es: que se trate de ura operación buena técnicamente hablando, es decir, buena para la economía del país. Y para saber cuáles son las operaciones buenas para la economía española es trascendental el juicio del Banco de España.

Asimismo, el presidente de la Generalítat, Jordi Pujol, se entrevistó ayer en Madrid con el ministro de Economía, Carlos Solchaga, con el que trató, entre otros temas, de la fusión de las cajas. Solchaga reiteró a Pujol su posición favorable al proyecto, y se evidenciaron en este tema, según medios de la Generalitat, posturas "matizadamente diferentes" entre ambas administraciones, informa José Antich.

CC OO: "Es una absorción"

Los representantes de CC OO en los consejos de La Caixa y Caixa de Barcelona votaron en contra del acuerdo de fusión por considerar que "en realidad se pone en marcha un proceso de absorción encubierta", según fuentes del sindicato. Las mismas fuentes indicaron que "en esta fusión están privando los intereses particulares de algunos directivos de Caixa de Barcelona sobre los de la entidad".En las últimas semanas, CC OO ya había fijado su postura frente a la fusión poniendo dos condiciones para aceptarla: el respeto a los puestos de trabajo y las condiciones sociales, económicas y laborales de los empleados, incluida la no movilidad geográfica y, en segundo lugar, que se tratara "realmente de una fusión, es decir, que los acuerdos fueran justos y equitativos para ambas cajas".

Fuentes del sindicato manifestaron anoche que "a la vista del acuerdo de los consejos, se puede decir que esa segunda condición no se cumple".