La presencia militar en Anchuras es cuestión de imagen, según el jefe del destacamento

El comandante Juan Ernesto Calderón, jefe del destacamento del Ejército del Aire que se encuentra desde el pasado lunes en la dehesa de El Claral, propiedad del Ministerio de Defensa, reconoció ayer que la estancia de este grupo de control aéreo en la zona obedece a una cuestión de imagen y al "establecimiento de la presencia física" del Ejército en el lugar, dado el abierto enfrentamiento de los vecinos de Anchuras (Ciudad Real) al proyectado campo de tiro. Este grupo tiene previsto abandonar la zona el viernes.

El comandante Calderón negó que el destacamento que dirige este realizando trabajos topográficos. Cualquier movimien to militar podría generar un incremento del malestar entre los habitantes de la zona. Un retén permanente de vecinos mantiene cortados los accesos a la finca El Cijaral por el término municipal de Anchuras, y ha cavado zanjas en el monte en el límite entre esta localidad y Minas de Santa Quiteria, para reforzar la acción.Un grupo de vecinos de Anchuras, con el alcalde Santiago Martín a la cabeza, se desplazó, a última hora de la tarde de ayer, al campamento militar para exigir a los mandos que retiraran un rótulo situado en el frontal de una de las tiendas de campaña con la inscripción: "Campo de verano Anchuras Hilton". La pancarta, pintada con betún negro sobre una madera, fue borrada por un mando, quien pidió posteriormente disculpas por este hecho.

El destacamento militar lo componen 19 miembros, entre ellos ocho suboficiales, un teniente y un comandante, pertenecientes al grupo de control aéreo del aeródromo de Tablada (Sevilla). La mayoría de los integrantes de esta unidad acampó durante una semana, el pasado mes, en la finca El Cijaral, en la primera operación que llevaba a cabo el Ejército en Anchuras.

La misión habitual de este destacamento es montar el sistema aerotáctico de apoyo en operaciones con fuerzas terrestres, al disponer de la logística y de los sistemas de comunicación necesarios. Este grupo ha actuado con anterioridad en otros campos de tiro de Chinchilla, San Gregorio (Zaragoza), Arenosillo (Huelva) y en el de las Bardenas (Navarra), según fuentes militares. Esta unidad tiene previsto abandonar la zona el viernes, aunque se asegura que la presencia militar va a ser frecuente y "siempre que se requiera".

Para el alcalde de Anchuras la presencia de los militares, por segunda vez consecutiva en los últimos dos meses, significa "una toma de pulso a la gente, y si piden una respuesta, la van a tener. La fuerza está creciendo", agregó Santiago Martín.

Hoy, cuando se cumple un año de la decisión del Gobierno de ubicar en las proximidades de Anchuras un polígono de tiro, en sustitución del de Cabañeros, está previsto que los alcaldes que se han solidarizado con la oposición del municipio de Anchuras a la instalación militar mantengan una reunión, tras la cual se presentará un manifiesto contra el proyecto de Defensa.

La presencia militar coincide igualmente con la celebración de la Primera Semana Cultural de Anchuras. A última hora de ayer acudió al lugar el parlamentario de las Cortes regionales Miguel Ángel Pérez Cabezas, del PP.