Jordan no pudo evitar la eliminación de Chicago

Los Detroit Pistons, al eliminar a los Chicago Bulls de la semifinal de la NBA únicamente en seis partidos, han demostrado que tienen pinta de campeones. Es un equipo con múltiples figuras estelares, de múltiples recursos y con un técnico que se las sabe todas. La victoria de los Pistons, 94-103, sobre los Bulls el viernes culmina un año de esfuerzo y sacrificio, que comenzó en junio pasado, cuando perdieron el partido decisivo de la final con los Lakers de Los Angeles. Los Pistons ya tienen lo que han codiciado durante todo este tiempo: la oportunidad del desquite.

"Ahora comprendemos cómo han jugado los Bostons Celtics y los Lakers durante sus épocas de campeones", declaró el base Isiah, Thornas, la figura central del partido del viernes al sumar 33 tantos, cuatro asistencias y tres cortes de balón. "Cuando los. Lakers nos derrotaron el año pasado pactamos que para esta temporada íbamos a terminar primeros en las tablas de clasificación, íbamos a llegar a las finales e íbamos a salir victoriosos. Hemos logrado dos de los tres objetivos y ... es duro, muy duro, lograrlo".La final comienza el martes por la noche (3.00 horas miércoles hora peninsular) en Detroit y los Pistons disfrutan de una ventaja que no tenían el año pasado, el partido decisivo será en casa. Promete ser otra serie disputada y dura, entre dos auténticos pretendientes al trono. Los Lakers está invictos en los play offs mientras los Pistons todavía no han permitido que les anoten 100 puntos des de que comenzó la postemporada. Son dos equipos que se enorgullecen de su defensa y del brío, dos equipos que no cederán en lo más mínimo.

Cansancio y banquillo

Ni siquiera el gran Michael Jordan pudo con los Pistons. Marcó 32 puntos y 13 asistencias el viernes pero fue un rendimiento insuficiente. Los Bulls necesitaban un esfuerzo extraordinario, sino un milagro, para obligar un partido decisivo en esta serie. Tuvieron que jugar sin el alero Scottie Pippen, quien sufrió un codazo en la cabeza en el primer minuto. Quedó tan atontado que tuvo que ser ingresado en el hospital como precaución. Tampoco los Bulls tuvieron suficiente soltura. Fallaron 13 de 34 tiros libres. Jordan falló siete de 12, cinco de ellos consecutivamente en el último tiempo.Los Bulls llevaron el peso del partido en la primera mitad, pero como les sucedió en los últimos tres encuentros que perdieron: cedieron a causa del cansancio y la falta de suplentes de categoría.