Manili y Joselito querían seguir toreando, pese a la lluvia

Las ganas de triunfo que albergaban Manili y Joselito llevaron a ambos a comunicar al presidente del festejo, Luis Espada, sus deseos de continuar la corrida, pese a la tromba de agua que estaba cayendo. Los dos se opusieron, en principio, a la decisión de compromiso que adoptó Espada: esperar 15 minutos por si paraba de llover. En estos debates transcurrió prácticamente ese tiempo, y el presidente decidió suspender definitivamente, con la aquiescencia resignada de los diestros.Joselito se fue convenciendo poco a poco de que no valía la pena continuar con la corrida, según admitía al finalizar la misma: "Allí en la plaza estás caliente y sólo piensas en que salga el toro para poder triunfar, la ilusion se impone a la razón". Reconocía que conforme avanzaba el tiempo y veía el estado del ruedo dudaba ya de si valía la pena seguir: "Adernás, escuchas a otras personas que te intentan hacer razonar fríamente y, aunque te fastidia ver que se te escapa la tarde, cedes".

El madrileño se quejaba de la mala suerte que le acompaña en esta feria con la lluvia, que ya le obligó a suspender su reaparición el miércoles 24: "Porque si sale el toro, aunque sea difícil y violento, como el único que maté, existe alguna posibilidad de éxito. Pero es muchísimo peor que se suspenda por la lluvia. De los cuatro toros que debía llevar ya lidiados, sólo he podido matar uno. Le voy a tenerle más miedo al agua que a los toros".

Manili aún insistía en sus argumentos, ya en la tranquilidad de la habitación de su hotel, al término de la corrida: "En esos largos instantes de diálogos hubo tiempo para que yo matara al quinto. Después ya el ruedo era un barrizal impracticable". Añadía que si no puso mayor rotundidad en su idea de continuar lidiando era por respeto a sus subalternos, "aunque ellos nunca se pronunciaron", puntualizaba.

La corrida del día 6

El de Cantillana no quería irse sin redondear una faena y decía que el quinto toro de la tarde era su última oportunidad. Una oportunidad que podría haber tenido el día 6 de junio. En esa fecha, el empresario Manuel Chopera tiene la intención de dar la unica corrida que se va a repetri de las tres supendidas completas, la del lunes 22, en la que estaban anunciados toros de su ganadería -Martínez Elizondo-, para Ruiz Miguel, Roberto Domínguez y Manili. Sin embargo, José Molina, apoderado de éste último, se negó en la mañana de ayer a que Manili haga ese día el paseíllo, como explicaba: "Ya todo es distinto, con la feria terminada, el público cansado, y el cartel de la Beneficencia cerrado. Tal vez de haber sabido la suspensión de esta tarde, no lo habría decidido, pero ya no es serio volverse atrás".

Respecto a esta corrida, Ruiz Miguel aseguró que sí la va a torear, y Roberto Domínguez informó a última hora de anoche que también estaba dispuesto, aunque era su apoderado Manolo Lozano el que decidiría hoy.