Barranco: "El que va a mandar y gobernar el Ayuntamiento de Madrid es Fraga"

Juan Barranco, alcalde de Madrid, opina que Suárez y Fraga deberían convocar una consulta popular para ver qué opinan los madrileños sobre la moción de censura. Así lo afirma en la primera entrevista concedida tras la presentación de la moción en el Ayuntamiento de la capital de España. El alcalde, que anunciará mañana, lunes, el día de celebración del pleno de censura, no ve razones objetivas para su reprobación. Barranco considera que los 10 años de gestión socialista han sido positivos para Madrid; muestra su esperanza de firmar, antes de ser sustituido, el plan de mejora del transporte y tráfico; asegura que antes de 1991 el PSOE iba a dedicar suelo para 50.000 viviendas sociales, e insiste que la operación, de la que se siente víctima, no es municipal. "El que va a mandar y gobernar este Ayuntamiento va a ser Fraga".

"Lo primero que tienen que explicar los autores de la moción es por qué han tomado esta decisión y qué va a sacar en claro el pueblo de Madrid. La gran pregunta que se hacen los madrileños es ¿por qué?". Barranco se apresura a afirmar que no le valen los argumentos dados por populares y centristas. Pregunta. ¿Cuáles son los temas que el PSOE no ha podido solucionar y puede utilizar el centro-derecha para defender la moción?

Respuesta. No estoy por la autoflagelación. Las razones las tendrán que dar los que han presentado la moción. El Partido Popular y el CDS justifican la moción en el deterioro de los ser vicios de sanidad y seguridad y de los servicios municipales. Cualquiera que conozca nuestras competencias sabe que sanidad y seguridad no dependen de nosotros. También argumentan la necesidad de garantizar la estabilidad en el gobierno. Es chocante, porque en junio de 1987 yo ofrecí un pacto de gobierno al CDS y a IU. No aceptaron, y el CDS ahora decide gobernar con la derecha. Por ello, los firmantes de la moción tienen que explicar cómo la justifican desde el punto de vista de la gestión y eficacia de los servicios y por qué es candidato a alcalde un diputado por Ávila que es portavoz en el Congreso de un partido que recibió en Madrid 420.000 votos menos que el PSOE y 300.000 menos que el PP.

Reequilibrio de la ciudad

P. ¿Pero qué ha hecho el PSOE por Madrid y qué se ha dejado en el tintero? R. El PSOE ha hecho cosas muy positivas y muy importantes. Lo digo sin autobombo ni complacencia. En estos 10 años se han producido avances como el reequilibrio de la ciudad, con una inversión muy fuerte en los barrios obreros, carentes de ser vicios esenciales. Ahora tienen polideportivos, centros culturales, parques. En estos barrios, el Ayuntamiento da la misma calidad que en el resto de Madrid. Se ha producido un avance en la recuperación de la cultura. Esta ciudad tiene un pie en el pasado, gracias a la recuperación de la memoria histórica y las tradiciones, y otro en el futuro, gracias a su modernización. Heredamos una ciudad conformada y construida sobre criterios de especulación económica. Hemos intentado corregir estos problemas mediante la recuperación del centro y la rehabilitación del casco antiguo, que estaba abandonado. Se han detenido la especulación y el deterioro de la ciudad. También se ha avanzado en la apertura del Ayuntamiento al movimiento ciudadano y en la descentralizlo que ha su puesto un acercamiento de la Administración a los vecinos. Habría que sumar la nueva distribución por distritos y la política de información al ciudadano.

P. Dice que se ha detenido la especulación, pero las viviendas tienen precios prohibitivos, y el terreno que el Ayuntamiento pone a la venta alcanza cifras exageradas. ¿En qué ha consistido el control de la especulación?

R. Me refería a la especulación descarada que se producía antes de 1979 por ausencia de normas y de garantías jurídicas, por el arbitrismo que existía. Hicimos un Plan General de Ordenación Urbana, aprobado en 1985, y unas normas de protección. Hemos conseguido así marcar las normas por las que transcurre esta actividad. Ahora hay unas reglas del juego claras, transparentes y conocidas. Lo que ocurre es que han incidido situaciones como el blanqueo de dinero, las expectativas de futuro, la entrada en Europa o algunos decretos poco afortunados sobre alquiler. Los precios han aumentado, como ocurre en todas las ciudades, pero no jugando con la indefinición. Cierto que hay un problema de fondo en el que tenemos responsabilidades. El problema no es que un señor pague una vivienda a 600.000 pesetas el metro cuadrado. Nuestro problema es que un joven o una familia trabajadora que quiera una casa no encuentre viviendas a su alcance. Estamos intentando corregir este problema por la vía de regalar terreno a cooperativas de trabajadores. Al pleno de este mes llevamos el concurso para adjudicar 18.000 de estas viviendas. Se ha hecho un gran esfuerzo y se va a seguir haciendo. Estoy convencido de que con los miles de metros que el Ayuntamiento está ofertando ya ha comenzado a notarse una contención de los precios. El objetivo es llegar en 1991 a 50.000 viviendas sociales. Para ello pensamos sacar otras 20.000 viviendas para familias y jóvenes, con la posibilidad de que éstos adquieran o alquilen la vivienda.

Potenciar el transporte

P. También es competencia municipal la circulación. En este momento se negocia un plan de tráfico, entregado a Felipe González, en el que se defiende la potenciación del transporte público. ¿Se va a mantener este plan o va a sufrir alguna modificación? R. No hay soluciones milagrosas ni rápidas. El tráfico es un problema importante en todas las ciudades, Nosotros pretendemos mejorar el transporte público y crear una conciencia ciudadana sobre una utilización más racional del automóvil. El plan, que supone una inversión de 350.000 millones, va adelante, y espero poder firmarlo yo, porque sólo está a falta de acuerdo sobre financiación, aunque lo que importa es que se ponga en marcha.

P. Su equipo ha defendido las competencias municipales cuando han chocado con las regionales. ¿Tras la moción, mantendrán una postura similar o van a alentar un mayor protagonismo del Gobierno Leguina?

R. Vamos a seguir en la misma línea seria, constructiva y respetuosa. Nuestra actitud está a favor del reforzamiento de la institución municipal. Creemos que las administraciones locales deben ser más importantes. Por eso he reclamado en el Senado que se reflexione sobre los efectos de la inestabilidad de los gobiernos municipales. Hay que centrar los esfuerzos en garantizar la estabilidad y no estar en pequeñas batallas políticas. Los ayuntamientos no deben convertirse en trampolín de operaciones políticas de otros ámbitos.

P. ¿Puede conseguir esta estabilidad un Gobierno municipal de centro-derecha?

R. Puede ser, aunque lo dudo. La estabilidad podría haberse conseguido en 1987. Ahora se va a intentar por la vía de un Gobierno de derecha. Si nos atenemos a lo ocurrido en estos dos años, no parece posible, pero hay que otorgarles el beneficio de la duda. El Partido Popular y el CDS lo único que han conseguido hasta ahora es repartirse cargos, y eso a cuenta de aumentar el número de áreas. A la vista de los acontecimientos, el que va a mandar y gobernar este Ayuntamiento es Fraga. No obstante, la transición, si es que se produce, se realizará con responsabilidad, dignidad y cordialidad.

P. ¿Cómo cree que puede afectar esta moción al resultado de próximos comicios?

R. Creo que va afectar para bien. Lo que están haciendo estos señores es un gran error. La encuesta hecha por EL PAÍS así lo indica. Habría que preguntar les a los madrileños si están de acuerdo con la moción. Lacen sura es legítima, pero la Administración central y algunas comunidades tienen además el recurso de disolver las cámaras y acudir a la consulta popular. En los municipios no tenemos esa posibilidad. Sería muy interesante y una prueba de respeto que Suárez y Fraga se plantearan hacer una consulta popular para ver qué opinan los madrileños sobre esta moción, que forma parte de una operación más amplia para que Fraga consiga una única derecha. Cuando se producen crisis se debe ir al fundamento de la democracia, que es la consulta a los ciudadanos. De todas formas, la opinión del pueblo madrileño se verá reflejada en las próximas elecciones municipales.