Jon Gangoiti: "Vamos a devolver el orgullo a los vascos"

Jon Gangoiti, economista bilbaíno de 37 años, intenta de nuevo ante las urnas la aventura del Parlamento Europeo representando al PNV. En junio de 1987, la falta de unos miles, de votos le obligó a quedarse en casa mientras Carlos Garaikoetxea y Txema Montero preparaban las maletas para Estrasburgo. La Coalición Nacionalista, dirigida por su partido, reúne ahora a las Agrupaciones Independientes de Canarias, la Coalición Galega y el Partido Nacionalista de Castilla y León.

Un acuerdo de rotación garantiza la presencia de los tres primeros de la lista en el Parlamento Europeo, aun en caso de conseguir sólo un escaño.Pregunta. El PNV es el principal partido democristiano en España. ¿Participará en el Grupo Popular europeo?

Respuesta. Por supuesto. Hay razones históricas poderosas. Nosotros contribuimos a la fundación de la internacional democristiana. Poca gente sabe que la CDU [Unión Cristiana Democrática] alemana se afilió a la internacional en París, precisamente en la sede del Gobierno vasco, durante una reunión presidida por el lehendakari José Antonio Aguirre. Además, los grandes temas relacionados con la Europa de 1993 están saliendo adelante por consenso entre el grupo democristiano y el socialista. Estar con los democristianos equivale a pertenecer a uno de los dos grupos con poder real.

P. La incorporación del Partido Popular (PP) español puede estorbarle a usted mucho.

R. Está por ver si el PP se integra en el grupo democristiano. Si lo hace tendrá que aceptar el programa del Partido Popular Europeo, que en el apartado 422 habla del derecho a la autodeterminación de todos los pueblos de Europa. Sería un paso muy importante y nos alegraría mucho.

P. Su nombre encabeza una lista de vascos, gallegos, canarios y castellano-leoneses. ¿Qué hay de común en esa coalición?

R. La ley electoral española es centralista. Al fijar la circunscripción única nos obliga a entrar en coaliciones. A los demás partidos nos unen el planteamiento nacionalista y la defensa del eje atlántico. La Europa actual está configurándose de una forma muy peligrosa para nosotros, en base a un eje Milán-Lyón-Barcelona, claramente mediterráneo. Los que estamos en la Coalición Nacionalista coincidimos en el interés por un desarrollo armónico que integre la vertiente del Atlántico.

P. ¿Hubiera preferido el PNV acudir con los catalanes de Convergència y Unió?

R. Ellos mantienen su opción aparte. Coincidimos en muchas cosas, pero la Europa actual es económica. Nuestra coalición responde a intereses comunes y piensa defenderlos.

Europeísmo

P. El PNV se adelantó al europeísmo ya en los años treinta. ¿Qué espera de la unidad continental?R. Antes de la guerra civil se realizó un Aberri Eguna con el lema Euskadi-Europa, es cierto. Hemos seguido creyendo en ese proyecto, y participamos en la creación del movimiento de unidad europea, que es una experiencia única en la historia de la humanidad. Éste es el primer proyecto de unión voluntaria, y, como decía Jean Monnet, sólo será posible si se da a cada pueblo lo que le corresponde. En consecuencia, habrá que respetar los derechos de las naciones sin Estado.

P. Los Estados no van a aceptar fácilmente una Europa de los pueblos.

R. Los Estados están ya en crisis. La soberanía del Estado la han definido las fronteras, la moneda, las relaciones exteriores y el Ejército. Con la perspectiva de 1993, el Ejército seguirá siendo de los Estados, las relaciones exteriores las ha asumido ya en parte la Comunidad, la unidad de cuenta europea (ECU) puede sustituir durante la próxima década a la peseta y al franco, y las fronteras van a desaparecer el 1 de enero de 1993. Nos encontramos ante una realidad nueva en la que es posible que las naciones estén en pie de igualdad con los Estados.

P. En ocasiones se critica el europeísmo del PNV porque se considera una tapadera del antiespañolismo o una renuncia al nacionalismo.

R. No hay nada de eso. Es posible aumentar las competencias de Euskadi, según el estatuto y la Constitución, mientras los Estados van traspasando otras al poder europeo. Puede llegar un día en que tengamos las mismas competencias que los Estados. No es una quimera.

P. ¿Le va a ayudar o le va a perjudicar en las urnas la evolución última de su partido?

R. Va a ayudar, subiremos en votos. Hemos evolucionado porque cuando tuvimos una mayoría absoluta nos la creímos demasiado y llegamos a identificar pueblo vasco con PNV. Fue un error. La pérdida de la mayoría y la crisis del partido provocaron la reflexión. Ahora tenemos un talante distinto y un planteamiento de apertura hacia la sociedad.

P. ¿Cuando se les acusa de caminar hacia un sano regionalismo no les hace mella?

R. En absoluto. Esas críticas se producen porque gobernamos con el partido socialista. En la época de la guerra ya tuvimos un Gobierno con el partido socialista y el partido comunista, y luego se mantuvo en el exilio. Lo importante es que Euskadi avanza. También Aguirre y Leizaola estuvieron en coalición con partidos no nacionalistas. No es nada nuevo.

P. La oferta nacionalista en Euskadi es muy variada. ¿Por qué votarles a ustedes?

R. Nosotros pertenecemos a uno de los dos grupos europeos que toman las decisiones sobre el futuro de la Comunidad y que tienen el poder en el Parlamento. Ahí es donde hay que estar.

P. ¿Cómo influye ETA en el papel de los vascos en Europa?

R. La verdad es que el prestigio de los vascos, ganado con mucho esfuerzo, está ahora en entredicho. Hay que devolver al vasco el orgullo de serlo. Aunque ETA proyecta una impresión deformada de nuestro país, las cosas empiezan a cambiar. El futuro de Euskadi no pasa por los violentos.