Garnica intenta desgajar Valenciana de Cementos de Banesto
La familia Garnica -Pablo Garnica padre es presidente de honor de Banesto y su hijo Pablo es consejero de la entidada- dquirieron, entre el primero de marzo y el 14 de abril, aproximadamente el 3,5% del capital de Valenciana de Cementos, dijeron las fuentes bancarias y bursátiles consultadas. El movimiento supuso una inversión de 6.514 millones de pesetas por 352.389 títulos. La carrera por intentar controlar una cuantía mayor de capital fue frenada por la intervención de parte del consejo de Banesto y por el presidente de la entidad, Mario Conde, logrando un armisticio precario. Una fuente de Banesto señaló que el consejo de Valenciana de Cementos "está unido en contra de esta ofensiva y el proceso se ha detenido", pero declinó decir quien había emprendido la ofensiva. Una fuente bursátil señaló, por su parte, que el paquete cruzado en marzo fue cedido por la familia Serratosa, uno de los accionistas significativos de Valenciana, quien conservaría un 20% del capital, cifra no confirmable.Los analistas bursátiles consultados señalaron que el objetivo de la familia Garnica era intentar apalancar su inversión asociándose a un grupo extranjero para desgajar a la cementera del grupo Banesto tomando como base de maniobra el capital de Valenciana acumulado, cuya dimensión real puede superar el 3,5% comprado en marzo.
Sin embargo, la presencia de la cementera noruega Akernorcem, con el 11 % del capital de Valenciana hace pesar sobre este poderoso grupo el futuro del control y posible desgajamiento de la cementera. Un portavoz de Euroc, compañía sueca ¿le cementos que posee el 20% de Aker, con la que tiene una sociedad conjunta en la que se mantienen las inversiones extranjeras -Skancem- dijo que "nuestra sociedad está interesada en incrementar su participación en Valenciana a largo plazo pero sólo sobre la base de acuerdos con el accionista mayoritario", el portavoz no dijo a quien considera accionista mayoritario. De todas formas, el hecho que el grupo no quiera verse involucrado en una batalla hostil puede acabar en un rechazo de Skancem a cualquier operación que le oponga frontalmente con el banco.
Armisticio precario
Banesto, que posee entre el 35% y el 40% de Valenciana, haría demasiado compleja una operación hostil. La operación de picoteo del capital por parte de los Garnica quedó aparentemente frenada, aunque las fuentes consultadas no descartan que el armisticio sea temporal y dependa realmente de que otro paquete significativo aparezca en el mercado. Ambas partes parecen en equilibrio precisamente por la presencia del grupo extranjero.En realidad, la batalla, que enturbió las relaciones entre la familia tradicional del banco y Mario Conde, tiene como telón de fondo las tensiones residuales en el consejo del banco y el objetivo de crear una corporación industrial escindiendo la cartera bancaria de las participaciones industriales y fusionando las isas. El canje de títulos de las participadas por títulos de la corporación supondrá una dilución de las participaciones. Ésto, que debilitará la posición de accionistas en cada empresa, puede a la larga ser un arma de doble filo.
Hay que esperar a ver cuál puede ser la reacción de socios actuales o potenciales nacionales y extranjeros en industrias específicas ante la realidad de quedar diluidos en un conglomerado Industrial aún sin definir. Ésto llevó a Banesto a definir, primero, una estrategia de capital. Aquellas sociedades en las que controle el 51 % del capital serán derivadas al conglomerado. En las que tenga menos, si la rentabilidad de la sociedad lo justifica, aspira a tomar el 51%. En los casos en los que no pueda o no quiera, venderá.
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