El Gobierno expresó su malestar a Casaroli por algunos programas de la COPE

El presidente Felipe González expresó el malestar del Gobierno por algunos programas de la Cadena de Ondas Populares Española (COPE) en la entrevista que el cardenal Agostino Casaroli, secretario de Estado vaticano, realizó durante su visita a España el pasado mes de diciembre, según han manifestado fuentes próximas al partido socialista. En aquella ocasión, el cardenal Casaroli puso de relieve la preocupación de la cúpula eclesiástica española por algunos programas del Ente Público RTVE, mientras que el presidente hacía lo propio con otros espacios de la COPE, de la que es propietaria la Conferencia Episcopal.El hecho se produjo dos meses antes de que el vicepresidente Alfonso Guerra manifestara a la cadena SER que los medios de comunicación cercanos a la Iglesia o de su propiedad trataban con dureza al Gobierno. Esta serie de críticas se vio engrosada la pasada semana con las del secretario del episcopado, Agustín García Gasco, que no comparte, al igual que el presidente de los obispos, Ángel Saquí'a, algunos contenidos de programas de la COPE.

Los motivos del Gobierno y de la cúpula del episcopado son distintos. Mientras el Ejecutivo se lamenta del trato que recibe, Ía jerarquía católica hace hincapié en la necesidad de una ortodoxia doctrinal más clara. Pero incluso en el seno del propio episcopado las razones son diversas. Así lo puso de relieve ayer el presidente de la Comisión Episcopal de Medíos de Comunicación Social, Joan Martí Alanis, quien dijo que las quejas de los obispos van desde la falta de uso de lenguas vernáculas hasta el tratamiento de problemas de las iglesias particulares. Martí Alanis agregó que la mayor parte de obispos tiene mejor impresión de la COPE que la expresada recientemente por García Gasco.

Sin embargo, fuentes próximas al episcopado han llegado a barajar la posibilidad de sustituir a altos cargos de la COPE. Ayer, en la conferencia de prensa que clausuró la 50º asamblea plenaria del episcopado, Martí Alanis manifestó que se está estudiando un replanteamiento estatutario y de órganos de gobierno a medio plazo.

Entre los defensores de profundos cambios se encuentran el secretario del episcopado, Agustín García Gasco, y el cardenal Ángel Suquía, mientras que otros prelados son favorables a cambios de menor calado. El portavoz del episcopado, Joaquín Luis Ortega, dejó claro ayer que "las decisiones sobre la COPE no se toman en la asamblea plenaria". Sin embargo, los obispos, de acuerdo con Ortega, han deliberado, pero no han votado nada. Martí Alanis puso un ejemplo ilustrativo al comparar este intercambio de opiniones con el bar de las Cortes, donde los políticos hablan, "pero las leyes se debaten en el hemiciclo". "Entre los obispos", añadió Martí Alanis, "apareció una sensación agridulce".