Sólo 21 países están al día en sus cuotas de la ONU, dice su director en España
La legitimidad de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) ha aumentado, pero su poder "sigue siendo deficitario", por lo que es necesario fortalecerla para que pueda operar con más energía y rapidez "en materia de paz y seguridad internacionales", afirmó ayer en Madrid José Rodríguez Elizondo, director del Centro de Información de la ONU para España, en una conferencia pronunciada en la Sociedad de Estudios Internacionales. Sólo 21 Estados miembros, entre ellos España, han pagado totalmente sus contribuciones.A finales del pasado febrero, las contribuciones pendientes al presupuesto regular de la ONU ascendían a 522 millones de dólares. "Sin duda son cifras irrisorias si se las compara con las cifras de la guerra o con el monto del gasto militar global, calculado en un billón de dólares", afirmó.
Rodríguez Elizondo recordó la advertencia del secretario general de la ONU, Javier Pérez de Cuéllar: "Es inaceptable que en medio de negociaciones de paz urgentes nosotros debamos consagrar parte de nuestra atención y de nuestra energía a la crisis financiera de la organización".
El "realismo escéptico" con que se ha mirado la labor de la ONU está declinando y se registra, en cambio, un "paulatino retorno a la esperanza original" que inspiró la creación del organismo internacional en 1945, la esperanza de evitar "el flagelo de la guerra", subrayó Rodríguez Elizondo. Recordó también que "muchas guerras" han venido estallando sin que nadie pudiera impedirlo, en referencia a los 150 conflictos bélicos librados, la mayoría de ellos en el Tercer Mundo, desde la creación de la ONU, tras la II Guerra Mundial.
Avances diplomáticos
El año pasado, dicha organización -que reúne en la actualidad a 159 países- intervino en el logro de avances diplomáticos en los conflictos de Afganistán, Irán-Irak, Angola, Namibia, Chipre, Camboya, el Sáhara occidental y Centroamérica. "Una verdadera concentración de resultados que se producían a despacho del déficit de la organización y en medio de la más severa crisis de su historia", agregó el conferenciante. Ese mismo año, las Fuerzas de Mantenimiento de la Paz, o cascos azules de la ONU, fueron galardonadas con el premio Nobel de la Paz.
Rodríguez Elizondo señaló que las Naciones Unidas "no son un organismo supranacional con poderes permanentes de coerción" para sancionar "las conductas internacionales punibles", por lo que "ha optimizado su capacidad política, jurídica, diplomática y negociadora". Por ese motivo, "las tareas de las Naciones Unidas relativas a la paz y la seguridad se desarrollan en sordina". Son, agregó, "tareas arduas y silenciosas". Este accionar, concluyó Rodríguez Elizondo, poco apto para encabezar los titulares de los periódicos o de los telediarios, puede colocar "a la opinión pública ante un reflejo falso de la realidad".
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