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El Parlamento polaco sella el compromiso histórico entre el comunista y la oposición

El Parlamento polaco aprobó ayer un paquete de leyes que marcan el comienzo de una nueva etapa en la historia de la Polonia popular al iniciar el proceso de desarticulación del monopolio del poder que desde la II Guerra Mundial ha tenido en ese país el partido comunista. La legalización de Solidaridad y de otras organizaciones independientes, así como la celebración en junio próximo de unas elecciones legislativas en las que, por primera vez desde hace 42 años, participará la oposición política, son los principales elementos del comienzo de "la transición polaca", que la oposición desea coronar con la celebración de unos comicios plenamente democráticos y libres en 1993.

Siguiendo las decisiones acordadas por el Gobierno y la oposición durante las negociaciones de la mesa redonda, la Dieta (Parlamento) ha aprobado ayer enmiendas constitucionales que, según palabras de uno de los diputados, "cambian de manera sustancial la concepción del Estado polaco" y Ponen fin a un sistema cuyas raíces estaban en la época estalinista. El Parlamento ha aprobado también tres leyes que implantan en Polonia la libertad de sindicación y asociación.Al intervenir ayer en la discusión parlamentaria varios diputados, a pesar del origen no democrático del actual Parlamento, han subrayado que "el actual sistema del ejercicio del poder no cumple con las expectativas sociales" y subrayaron la necesidad de la elaboración por el futuro Parlamento de una nueva Constitución. La Dieta decidió también ayer anticipar su propia disolución, lo que permitirá convocar las elecciones legislativas en el próximo mes de junio.

Estas elecciones, a pesar de no ser plenamente democráticas, distarán mucho de los plebiscitos a los que se parecía la farsa electoral practicada hasta ahora en los países europeos del Este. Las nuevas leyes crean la posibilidad de la participación en las elecciones de la, oposición política. Para presentar su candidatura, los representantes de la oposición deberán tener el apoyo de al menos 3.000 electores. Una vez cumplido este requisito, tendrán garantizado el acceso a los medios de comunicación y podrán convocar sin limitación alguna mítines electorales.

35% de independientes

Con arreglo al acuerdo preelectoral, logrado en las negociaciones de la mesa redonda, en la elecciones a la Cámara baja los candidatos independientes sólo podrán luchar por el 35% de los escaños. No obstante, al efecto de ese mismo acuerdo, el partido comunista tampoco tendrá la mayoría absoluta, lo que permitirá un limitado juego democrático dentro de esta Cámara.La mayor novedad es la creación del Senado, que será elegido de forma plenamente democrática. La oposición, que espera ganar la mayoría en esta Cámara, ha conseguido en las negociaciones de la mesa redonda importantes atribuciones para la Cámara alta, que de ninguna forma va a ser una institución decorativa. El Senado podrá vetar las leyes aprobadas por1a Cámara baja, en cuyo caso éstas deberán ser aprobadas nuevamente por la mayoría de dos tercios, de la que no dispondrá en la Cámara baja la coalición de partidos liderada por el Partido Obrero Unificado Polaco (POUP, comunista), que preside el general WqJciech Jaruzelski.

Éste declaró ayer que esperaba "una rápida respuesta" de Occidente a los acuerdos entre el Gobierno y la oposición en Polonia. Y agregó que un cambio en las relaciones "depende sólo de Occidente. Nosotros hemos ya pensado en aproximar las relaciones en beneficio mutuo".

"Hemos accedido a esto", dijo ayer en el Parlamento un diputado del POUP, "con un peso sobre el corazón, pero se trató de no romper las negociaciones".

En el nuevo sistema de instituciones políticas de Polonia el contrapeso para el Senado lo va a constituir el presidente, jefe de Estado y "custodia del sistema político", que será elegido por seis años por las dos Cámaras y que, sin lugar a dudas, será miembro del partido comunista polaco.

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