El 70% de los contratos realizados desde 1987 tienen una duración inferior a los seis meses

El número de trabajadores con contrato indefinido ha descendido en 257.300 personas entre el segundo trimestre de 1987 y finales de 1988, mientras que en el mismo período se han registrado 914.000 contratos precarios más, según un informe de Comisiones Obreras basado en los datos facilitados por el Instituto Nacional de Empleo (Inem) y que presentará en la mesa de concertación como parte de su diagnóstico sobre el mercado de trabajo. En el mismo se dice que en esos 20 meses se realizaron 14 millones de contrataciones visadas en el Inem, de las cuales diez millones (el 70%) son contratos de duración inferior a los seis meses, por lo que no generan derecho a la prestación por desempleo.Ello es causa, según el sindicato, de que se haya producido un superávit en las prestaciones contributivas por desempleo de 238.882 millones de pesetas en 1987 y de 297.130 millones en 1988. La responsable de empleo de CC OO, Salce Elvira, asegura que esos 536.012 millones de pesetas han servido para pagar los subsidios asistenciales de desempleo por lo que la aportación del Estado se ha limitado a 42.000 millones de pesetas.

Comisiones denuncia que pese a la precariedad en el empleo y la escasa cobertura a los parados, que afecta sobre todo a lo jóvenes, el único programa para incentivar el empleo estable acabó hace un año. Mientras tanto, las bonificaciones a los empresarios y las ayudas a la contratación ascienden, según sus cálculos, a una cantidad entre 300.000 y 400.000 millones de pesetas en el período 1987-1988.

Para Salce Elvira, si no se adoptan soluciones, los contratos eventuales afectarán al 60% de las plantillas en 1992, frente al 25% actual. Ese año se iniciará la libre circulación de trabajadores en los países de la CE y CC OO preve que entonces se producirán dificultades añadidas debido al retraso en la homologación de titulaciones por el boicó de Alemania y Gran Bretaña. En una circular del Ministerio de Trabajo, facilitada por el sindicato, se afirma que hasta 1996 no se habrán homologado las titulaciones de los trabajadores cualificados, por lo que Salce Elvira sospecha que "en España podrá trabajar quien quiera, mientras los españoles seguiremos siendo los peones y camareros de la CE".